Los cubanos emigrados que hoy viven en el exterior evitan visitar la Isla: los arribos caen un 52% en los últimos cinco años.
El número de cubanos residentes en el exterior (CRE) que regresan a Cuba ha disminuido drásticamente en los últimos cinco años, según datos oficiales de la Oficina Nacional de Estadísticas e Información (ONEI).
Entre enero y octubre de 2019, se registraron 514,571 ingresos de CRE al país, mientras que en el mismo periodo de 2024, la cifra cayó a 244,116, lo que representa un descenso del 52.5%.
Factores que explican el descenso
La recesión económica en Cuba, la inflación descontrolada y la falta de libertades políticas son las principales razones que desincentivan a los cubanos a regresar, incluso por cortos periodos.
Muchos emigrados señalan que la crisis en servicios básicos como alimentos, medicamentos y transporte hace que visitar la Isla sea cada vez más complicado.
Además, la salida definitiva de numerosos cubanos en los últimos años ha reducido los lazos familiares que tradicionalmente motivaban estos viajes. Analistas también señalan que los costos de viaje y los precios internos en Cuba han hecho del país un destino inasequible para muchos de sus propios ciudadanos en el extranjero.
Impacto económico
Esta caída tiene implicaciones significativas en la economía cubana. Los viajes de cubanos residentes en el exterior históricamente han representado una fuente importante de ingresos de divisas, especialmente para el sector turístico, controlado por el conglomerado militar GAESA.
Sin embargo, la reducción de estos arribos refleja una crisis económica que afecta tanto al turismo local como internacional.
Otros países también reducen sus visitas
El descenso de los CRE no es un caso aislado. Los países tradicionalmente emisores de turismo hacia Cuba, como Estados Unidos, España, Francia y Alemania, también han experimentado fuertes caídas en los últimos años. Según datos oficiales, mientras que Cuba recibió 3,563,494 turistas internacionales en 2019, esa cifra se desplomó a 1,973,173 en 2023, un descenso del 44.7%. Aunque en 2024 se proyecta una ligera recuperación con 1,844,858 visitantes, los números siguen lejos de los niveles prepandemia.
La tabla a continuación muestra los cambios en los arribos internacionales entre 2019 y 2024:
País | 2019 | 2024 | % Cambio |
---|---|---|---|
Estados Unidos | 452,835 | 118,038 | -74.0% |
México | 138,792 | 36,286 | -73.8% |
Argentina | 144,572 | 41,432 | -71.4% |
Francia | 145,702 | 52,858 | -63.7% |
Alemania | 138,792 | 53,207 | -61.6% |
España | 123,699 | 55,780 | -55.1% |
Cubanos (RE) | 514,571 | 244,116 | -52.5% |
Italia | 83,394 | 38,622 | -53.7% |
Canadá | 899,398 | 727,204 | -19.2% |
Rusia | 125,774 | 155,618 | +23.7% |
Un caso excepcional: Rusia
Mientras la mayoría de los mercados turísticos hacia Cuba han disminuido, Rusia es la única excepción con un aumento del 23.7% en 2024 respecto a 2019. Este incremento responde a políticas de colaboración entre ambos países, que han facilitado la llegada de turistas rusos en medio de la crisis energética y política.
Un futuro incierto para el turismo cubano
El turismo, una de las principales fuentes de ingresos para Cuba, enfrenta una crisis multifactorial. La disminución en los arribos internacionales y la pérdida de confianza de los cubanos residentes en el exterior subrayan la necesidad de cambios estructurales en el modelo turístico y económico del país. Sin estos ajustes, Cuba corre el riesgo de seguir perdiendo ingresos vitales en un momento crítico para su economía.