Una banda criminal de origen cubano, conocida como Cuban Auto Theft Group (CATG), fue desmantelada tras ser acusada de robar vehículos de lujo valorados en más de cinco millones de dólares. Su actividad ilícita se centraba en varios aeropuertos de Estados Unidos, causando pérdidas significativas y desafiando la seguridad de estas terminales.
Detalles de la operación criminal
Las investigaciones revelaron que el grupo robó 52 vehículos en el aeropuerto internacional de Dallas-Fort Worth (DFW), en Texas, generando pérdidas de 4,938,771 dólares. Además, operaban en otras terminales aéreas de Luisiana, Nuevo México, Nevada y Utah. Entre los vehículos sustraídos se encontraban autos de alta gama, que eran modificados ilegalmente para cambiar sus números de identificación y ser revendidos.
Los tres detenidos, Yoel Hernández Frómeta, líder de la banda, junto a José Antonio Pérez Rodríguez y Yainier Pinillo Toro, fueron arrestados en octubre y se encuentran recluidos en la prisión del condado de Tarrant, Texas. Hernández, considerado el cabecilla, enfrenta cargos graves y un extenso historial delictivo.
Así robaban los cubanos
La banda utilizaba herramientas avanzadas, como dispositivos de programación de llaves y sistemas de comunicación vehicular, para cometer los robos. Posteriormente, los vehículos eran retitulados y vendidos en Estados Unidos o llevados a México para su comercialización. Los arrestados enfrentan cargos por crimen organizado, robo de propiedad mayor y uso ilegal de instrumentos criminales.
Según las autoridades, Hernández estuvo implicado en numerosos incidentes de robo en el DFW y otros aeropuertos. Pinillo, por su parte, fue identificado en el lugar de los hechos en varias ocasiones. Ambos acumulan antecedentes penales relacionados con actividades criminales organizadas.
Impacto y medidas preventivas
El robo de autos alcanzó un récord en 2023, con 1,020,729 incidentes reportados en todo el país. En respuesta, el aeropuerto de Dallas-Fort Worth implementó medidas de seguridad que lograron reducir los robos en más del 40 % en lo que va de año. Un portavoz del aeropuerto destacó que la cooperación entre agencias locales, estatales y federales ha sido crucial para enfrentar esta problemática.
Aunque las investigaciones continúan, este caso pone de manifiesto la vulnerabilidad de los estacionamientos en terminales aéreas y la necesidad de fortalecer las medidas de prevención. La desarticulación de esta red supone un golpe significativo para las actividades delictivas en aeropuertos de Estados Unidos.