Las autoridades estadounidenses detuvieron una embarcación en los Cayos de Florida con migrantes a bordo el mismo día en que otro grupo de personas llegaba a Coral Gables. El caso se investiga como una operación de contrabando humano.
Operativos simultáneos en el sur de Florida
El martes por la mañana, un helicóptero del Departamento de Aduanas y Protección de Fronteras (CBP) detectó una embarcación de 22 pies con siete personas a bordo navegando hacia el este de Key Largo.
La información fue transmitida a unidades marítimas de CBP y del Servicio Guardacostas (USCG), que interceptaron la nave en Card Sound, una zona al sur de la Bahía de Biscayne, entre Key Largo y el condado de Miami-Dade.
Según CBP, en el bote viajaban cuatro ciudadanos ecuatorianos y dos chinos, además de un séptimo individuo sospechoso de ser el piloto y presunto traficante de personas.
Los migrantes fueron trasladados a un escampavías del USCG para su procesamiento y posterior deportación, mientras que el piloto quedó detenido por agentes del Departamento de Seguridad Nacional (DHS).
Apenas una hora antes de esta intercepción, la policía de Coral Gables detuvo dos furgonetas en Old Cutler Road con 26 migrantes chinos a bordo, en un caso que las autoridades consideran parte de una operación de contrabando humano.
Casos recurrentes en la misma zona
Este es el segundo gran operativo de tráfico de migrantes registrado en Coral Gables en lo que va del mes. El 17 de enero, la policía local detuvo un camión U-Haul y un Toyota Corolla con más de 20 personas en su interior, la mayoría de nacionalidad china, pero también ecuatorianos y brasileños.
En ambos incidentes, agentes del DHS investigan si los migrantes fueron trasladados a Florida a través de embarcaciones desde el Caribe o América del Sur, una práctica que ha aumentado en los últimos años debido a las restricciones migratorias impuestas en la frontera terrestre con México.
Investigación en curso
Hasta el momento, las autoridades no han confirmado si la embarcación interceptada en los Cayos está directamente vinculada con el caso de los migrantes hallados en Coral Gables, aunque la coincidencia en tiempos y nacionalidades de los involucrados ha despertado sospechas.
“La investigación sigue en curso, y estamos evaluando todas las conexiones posibles entre estos incidentes”, indicó un portavoz de la Patrulla Fronteriza.
Las autoridades federales continúan monitoreando la actividad marítima en el sur de Florida, donde han detectado un aumento en los intentos de ingreso irregular al país a través de rutas marítimas, especialmente desde el Caribe y Sudamérica.