La profunda crisis que vive Cuba respecto a los insumos en todas las esferas cada día se agudiza más. Las ópticas no son la excepción y en Villa Clara, por ejemplo, se nota el desabastecimiento pues apenas hay productos que ofrecer. De hecho, las personas se acercan a estos lugares especializados y muchos están cerrados o solo funcionan para reparar armaduras viejas. Si tienes suerte y hay cristales en oferta tendrás, luego de encargados, que esperar varias semanas para, por fin, tener tus espejuelos nuevos.
Los suministros son muy escasos y la situación se reitera mes tras mes. Las más afectadas son las personas mayores con serios problemas de visión. Ellas tienen que recurrir a los negocios privados y pagar hasta $6 000.00 CUP o $7 000.00 CUP por un par de espejuelos graduados. Increíble, ¿verdad?
¡Ojo! En el hipotético caso que tengas mucha suerte y haya existencia de tu cristal en la óptica, generalmente, debes llevar las armaduras. De lo contrario no cumplirás tu objetivo y seguirás padeciendo de la vista.
Falta de insumos y apagones
A esta creciente falta de insumos en las ópticas de Villa Clara y de toda Cuba hay que sumarle la situación energética. Muchas veces hay material para trabajar y no hay fluido eléctrico. La energía es fundamental para hacer este tipo de trabajo relacionado con el montaje de espejuelos.
La “estrategia” de los pacientes, en ocasiones, es desplazarse a otros municipios de la geografía villaclareña para tratar de “conseguir” los ansiados cristales. Sin embargo, muchas veces ni siquiera en territorios como Camajuaní, Remedios y Caibarién se pueden adquirir los espejuelos.
La Agencia Cubana de Noticias informó recientemente que todas las provincias solo tenían “discretas cantidades” de cristales esfero-cilíndricos. Estos se utilizan para la corrección refractiva de miopes y, por cierto, son muy demandados por los niños.