Los mercados de Florida, y sobre todo los de Tampa están ahora mismo abarrotados de residentes que intentan hacer compras de última hora para afrontar el paso del huracán Idalia. Sobre todo, se compran víveres y productos de primera necesidad para hacer frente a cualquier emergencia climatológica.
Las autoridades del estado y los especialistas en meteorología han instado a los residentes a no dejar para último momento las compras de todo aquello que pudieran necesitar para las próximas jornadas.
El meteorólogo Anthony Reynés fue enfático en las últimas horas al afirmar que se deben apertrechar de víveres para varios días. “Hay que asegurarse de que usted tiene comida y provisiones, como alimentos enlatados no perecederos, para todos los miembros de su familia, para por lo menos 7 días”, aseguró el experto, ante la proximidad de un huracán de gran potencial y que pudiera llegar con categoría 3.
Desde varios mercados de Tampa y la costa oeste de la Florida como Publix, Costco y Bravo Supermarkets han indicado que estarán trabajando en sus horarios habituales hasta que las condiciones climáticas así se lo permitan. De ser posible algunos abrirán a las 7 de la mañana de este miércoles.
“Sé que se avecina un fuerte huracán, así que, por supuesto, me gusta tenerlo todo preparado porque nunca se sabe lo que va a pasar, nunca sabemos cuanto tiempo estemos limitados, o si se se van a agotar los productos en las tiendas”, dijo Lidia Román, residente en Tampa.
Lo que más se compra ante el paso de Idalia
Si bien ahora mismo no se puede hablar de una marcada escasez de productos los que más pronto se podrían terminar debido a la alta demanda son los cilindros de gas, el agua, hielo, pan, enlatados, y conservas no perecederas, frutas, y también mucha cerveza.
También es noticia en las últimas horas que las autoridades de varias localidades que podrían verse afectadas han comenzado a repartir sacos de arena como protección ante las fuertes inundaciones y penetraciones del mar que podría generar Idalia en la zona.
Igualmente, se habla de la posibilidad de adelantar los beneficios del programa SNAP, conocidos como bonos o food stamps, con los cuales se pueden comprar alimentos en una buena parte de los supermercados y establecimientos comerciales de la Florida.