Santa Bárbara es una santa católica muy querida en Cuba, junto con la Caridad del Cobre, San Lázaro y la Virgen de Regla. Muchos cubanos saben que el 4 de diciembre hay que vestirse de rojo y ofrecerle una copa de vino a su imagen. Para la religión Yoruba, Santa Bárbara es Changó. ¿Por qué se venera tanto en la isla?
Esta santa llegó a Cuba desde España en 1599 y tiene su santuario nacional en Párraga, en La Habana. También es la patrona de los que trabajan con el fuego, como los mineros, los bomberos y los electricistas, por su relación con el rayo. Además, Santa Bárbara tiene varias canciones dedicadas a ella, tanto en su versión católica como en la africana, Changó. Una de las más famosas es la de Celina González, que dice:
«Santa Bárbara bendita, para ti surge mi lira
y con emoción se inspira ante tu imagen bonita.
Que viva changó, que viva changó», se puede escuchar.
Los cubanos celebran a Santa Bárbara según su fe, católica o yoruba. Lo que no suele faltar es el color rojo, una vela para pedirle favores y una copa de vino en su honor.
«Yo también de corazón te daré mi murmurío,
con orgullo y poderío, haré que tu nombre suba
y en el nombre de mi Cuba este saludo te envío,
que viva changó», cantan Celina y Reutilio.
Santa Bárbara y Changó en Cuba: celebración del 4 de diciembre
La historia de Santa Bárbara se remonta al siglo III, cuando vivió en Nicomedia, una ciudad del Imperio Romano. Su padre, un pagano fanático, la encerró en una torre para evitar que se convirtiera al cristianismo y la obligó a casarse con un hombre que no amaba.
Ella se reveló y se bautizó en secreto, haciendo tres ventanas en su celda para simbolizar la Trinidad. Su padre, furioso, la persiguió y la decapitó con su propia espada, pero en ese momento un rayo lo mató. Por eso, Santa Bárbara es la patrona de los truenos y las tormentas, y se la venera en muchos países de Europa y América Latina, especialmente el 4 de diciembre, su día.