Alemania advierte a sus connacionales sobre los riesgos para quienes viajan a Estados Unidos y cometan alguna imprudencia. Hay casos de detención que se prolongan durante semanas. Y muchos europeos comienzan a recortar sus vacaciones al país norteño o buscar otro destino.
La situación actual preocupa: viajeros europeos rechazados en la frontera, esposados o enviados a centros de detención. Las aduanas de Estados Unidos ahora provocan miedo. Y las reservas de viajes comienzan a disminuir.
Los casos de alemanes encerrados en celdas son tantos que el Ministerio de Asuntos Exteriores de Alemania ha tenido que modificar sus recomendaciones de viaje a los Estados Unidos. “Las declaraciones falsas sobre el motivo del viaje o incluso una pequeña violación del visado pueden provocar arresto, detención y deportación”, advierte su sitio web.
No es aún una alerta como las que se aplican a zonas conflictivas como Oriente Medio o ciertas regiones africanas, pero se acerca.
Varios ciudadanos europeos —turistas, estudiantes, científicos— han sido rechazados al llegar o, en el peor de los casos, llevados a centros de detención sin razones claras.
Los casos
Jessica Brösche, alemana de 29 años, estuvo detenida durante 46 días. Lucas Sielaff, también alemán y de 25 años, fue retenido por 16 días. Contó a Der Spiegel que lo llevaron a un centro de deportación “con una cadena alrededor del abdomen, esposado y con grilletes en los tobillos”.
Rebecca Burke, inglesa de 28 años, fue detenida durante tres semanas en una situación absurda. Al llegar desde Washington al límite con Canadá, le pidieron volver y rellenar correctamente los papeles del visado. Pero al regresar a suelo estadounidense fue arrestada.
A un investigador francés, según AFP, le negaron la entrada por sus opiniones políticas. Durante el control, inspeccionaron su móvil y su portátil, donde encontraron críticas a la política de Trump hacia el ámbito académico. Las autoridades estadounidenses aseguran que el rechazo se debió a la presencia de documentos considerados confidenciales.
Preocupación en el sector turístico
Aeropuertos, aerolíneas, agencias y hoteles mantienen un discurso oficial de confianza. Pero entre bastidores hay inquietud. Muchos visitantes se sienten inseguros, algunos postergan sus viajes, otros cancelan. El tema “se abordará en la próxima reunión del Airports Council International”, adelantó Armando Brunini, director de SEA.
Tendencias y previsiones
Las tarifas aéreas hacia Estados Unidos han bajado con fuerza en las últimas tres semanas o se mantienen estancadas cerca de la fecha de salida. Según Tourism Economics, los viajes internacionales al país caerán un 5% este año (frente al +9% previsto inicialmente) debido a “las políticas y la retórica divisiva de la administración Trump”, lo que se traducirá en una pérdida de 64.000 millones de dólares para el turismo.
Respuestas de las aerolíneas
Carsten Spohr, CEO del grupo Lufthansa, asegura: “Las reservas se mantienen estables”. Lo mismo dice Ben Smith, jefe de Air France-KLM. Una portavoz de Scandinavian Airlines coincide. Pero Smith advierte: “Si hay una caída, moveremos los aviones a otros destinos”.
En Swiss ya son más directos: los turistas suizos comienzan a buscar otros lugares. Los viajes de negocios siguen firmes, pero los de ocio bajan.
Entradas al país
Los datos del Departamento de Seguridad Nacional de Estados Unidos muestran una disminución de extranjeros que entraron al país en los dos primeros meses de 2025 respecto al mismo período de 2024: -6% desde Francia, -7% desde Alemania, -9,5% desde Italia (incluidos todos los pasaportes, también con escalas), frente a un promedio europeo de -1,7%.
Un dato curioso: el descenso desde Italia es leve en vuelos de aerolíneas no estadounidenses (-2,1%) pero se dispara en las estadounidenses (-24,5%).
Quienes viajaron parecen haber “boicoteado” a las compañías de Estados Unidos.
Turismo en cifras
En cuanto al turismo, si se observan únicamente quienes entraron con fines turísticos, según la International Trade Administration, los italianos crecieron un 2,8% en enero-febrero respecto al mismo periodo de 2024. También suben los españoles (+1,7%) y británicos (+5,4%). Pero caen los franceses (-4,9%), alemanes (-5,2%) y neerlandeses (-6,3%) según informa el diario Corriere della Sera.