Viuda del “pipero” del Hotel Saratoga: mi esposo ese día cubría un turno

Jornadas antes del Día de las Madres, Yanet Sánches quedó viuda y a cargo de tres niños pequeños, uno de ellos autista. A poco más de un mes de la explosión del Hotel Saratoga, la joven compartió sus sentimientos y vivencias tras perder a su esposo en el trágico acontecimiento.

La mujer, natural del municipio capitalino de Guanabacoa, relató que el fatídico 6 de mayo Julián Pupo Castellanos, su pareja, se levantó a primera hora. Aquel viernes lucía igual a cualquier otro. Él trabajaba como chófer de “pipas” para la Empresa de Gas de La Habana y su turno comenzaba a las 8 de la mañana junto a otra de las víctimas, Orlando Vargas. Se despidieron con un beso de hasta luego.

Las primeras horas del despacho de combustible transcurrieron sin problemas hasta que el equipo recibió una llamada imprevista. Debían cubrir a otros compañeros, a quienes les correspondía abastecer al Hotel Saratoga. El inmueble turístico reabriría sus puertas de forma oficial el 10 de mayo.

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A Yanet la noticia la tomó en casa. Aunque es maestra de preescolar, lleva años sin ejercer la profesión para cuidar a tiempo completo de sus hijos más pequeños. Yoselyn, de tres, y Yulian, de 11, estaban con ella en ese momento.

“Cuando me entero de la noticia, sin una lágrima le digo al niño: Ahora vengo, mi amor. Fuera de la casa, sin que ellos me vieran, me volví loca, los vecinos no comprendían qué me pasaba, me sequé las lágrimas y entré ”. La mujer regresó solo para explicarles que saldría por más tiempo. Su destino era ahora era el centro de medicina legal, donde debía reconocer el cuerpo de su marido.

Yanet y Julián se conocieron en 2008, con apenas 18 y 19 años de edad respectivamente. Desde entonces fueron inseparables. Comenzaron a vivir juntos y pronto dieron la bienvenida a su primer hijo, Víctor.

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Dos años más tarde, recibieron a Yulian, un pequeño que muestra serias dificultades para socializar y algunos rasgos que lo incluyen en el espectro del trastorno autista. Yoselyn llegó a la familia en 2019. A raíz de su nacimiento, Yanet pudo solicitar ayuda al gobierno local para obtener una vivienda propia.

Les facilitaron un terreno y la adquisición de materiales de fabricación. La esposa cuenta que Julián, sin ser albañil, se encargó de todo.  “Corriendo comenzó a construir, hizo un cuarto, el baño y la cocina para mudarnos lo antes posible a nuestra casita. Sabía hacer de todo, lo que se propusiera y le quedaba bien”.

“El 19 de abril fue mi cumpleaños, me hizo una comida deliciosa al carbón”, narra Yanet. “Fue la última vez que compartimos en familia. Por el día de las madres él iba a hacer la fiesta de ese mes, entonces pasó… Ahora quiero estar para los niños, y continuar todo lo que dejó por hacer, en honor a Julián, el amor de mi vida y de la vida de nuestros hijos”.

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¿Cómo evolucionan los heridos del Saratoga?

En la más reciente nota del Ministerio de Salud Pública (MINSAP), se dio a conocer que solo tres personas permanecen ingresadas como consecuencia de sus heridas en la explosión de gas. La autoridad médica de Cuba señaló también que el siniestro afectó la vida de 99 personas. De ellas, 46 fallecieron y 50 recibieron alta en jornadas anteriores.

Entre los sujetos todavía hospitalizados se reporta un menor de edad que recibe cuidados en el centro Pediátrico “Juan Manuel Márquez” de La Habana. Los demás son atendidos en el Instituto de Neurología y Neurocirugía y el Clínico-Quirúrgico “Hermanos Amejeiras”.

 

 

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