La aerolínea rusa Aeroflot, la principal compañía de ese país, anunció de manera oficial su regreso al Aeropuerto Internacional “José Martí” de La Habana a partir del próximo mes de diciembre. Esto aumentará las conexiones entre Moscú y la capital cubana, además de que sumará otra ruta a las ya existentes a diferentes terminales como las de Cayo Coco o Varadero.
La agencia Prensa Latina confirmó que Aeroflot volará desde la capital rusa hacia La Habana desde el 21 de diciembre todos los martes y viernes. La ruta se operará mediante aviones tipo Airbus A350 y afirmaron que ya se comenzaron a vender los boletos aéreos entre ambos destinos.
Recordamos que la compañía cuenta con oficina física en la capital cubana, donde puede adquirir los pasajes de su interés. La sede de la misma radica en el Centro de Negocios de Miramar, con teléfono +53 72047500. El año pasado en contacto directo con nuestra web indicaron que la venta en la isla sería en moneda nacional.
En cuanto a la página web de Aeroflot, esta indica que un boleto ida y vuelta, tenía un costo aproximado de más de 800 euros, unos 909 dólares americanos. Los vuelos, los martes salen de Moscú a las 9 de la mañana y aterrizan en La Habana sobre la 1:30 de la tarde. Aeroflot efectúa actualmente tres conexiones semanales con Varadero.
MÁS VUELOS ENTRE RUSIA Y VARADERO
Juan Carlos Escalona, consejero de Turismo de la embajada de Cuba en Rusia, precisó a la prensa oficial que aumentarían los vuelos a Varadero con una nueva conexión desde el Aeropuerto de San Petersburgo, la segunda ciudad en importancia de ese país.
Las conexiones se establecerán a partir del venidero 26 de diciembre con una frecuencia cada 10 días. Desde el 1ro de diciembre el gobierno ruso quitó las limitaciones de vuelos con varios países del Caribe, incluida Cuba. Así que paulatinamente deberán aumentar las conexiones, que ya son bastantes.
Desde ese día las aerolíneas rusas, con vuelos regulares o chárteres, tienen luz verde para retomar sus itinerarios a las ciudades cubanas de Santa Clara, Camagüey y Holguín, con las que tenían conexiones antes de la crisis sanitaria.