Las iguanas y el frío en el sur de Florida. Alertan esta semana de una posible «lluvia de iguanas» por las bajas temperaturas. A punto de este fenómeno curioso y sorprendente.
En el sur de Florida, cuando las temperaturas descienden por debajo de los 50°F, ocurre un fenómeno curioso que no deja de sorprender a los residentes: las iguanas verdes, una especie no nativa y ampliamente distribuida en la región, pueden quedar paralizadas y caer de los árboles.
Este evento, aunque conocido, siempre genera fascinación y dudas sobre su origen, algo así como una lluvia de iguanas en Florida, por el frío.
La Comisión de Conservación de Vida Silvestre y Pesca de Florida (FWC, por su sigla en inglés) explicó a Telemundo que estas caídas se deben a que las iguanas son animales de sangre fría, dependientes del calor externo para regular su temperatura corporal.
Cuando el termómetro baja, su metabolismo se ralentiza significativamente, llevándolas a un estado de inmovilidad temporal en el que pierden el control muscular.
El pronóstico para esta semana en el sur de Florida indica que podrían registrarse temperaturas mínimas cercanas a los 50°F, especialmente el miércoles, debido a un sistema frontal.
Además, los vientos fuertes, con ráfagas de hasta 25 mph, harán que la sensación térmica descienda aún más, alcanzando valores en el rango de los 40°F en áreas metropolitanas. Este descenso térmico aumenta la probabilidad de que las iguanas entren en su estado de parálisis.
Lluvia de iguanas congeladas en el sur de Florida puede verse esta semana
Según un estudio de Stroud, las temperaturas críticas para que las iguanas y otras lagartijas de la región se paralicen rondan los 44°F.
En este rango, el frío extremo interfiere con su capacidad de movimiento, haciéndolas vulnerables a lesiones o depredadores.
Sin embargo, esta condición es temporal y, con la llegada del sol y temperaturas más cálidas, los animales se recuperan y retoman su actividad habitual.
Aunque es tentador intervenir al ver una iguana inmóvil, los expertos recomiendan no molestarlas ni asumir que han fallecido.
Según Iguana Control, una organización especializada en el manejo de estas especies, el proceso de recuperación ocurre naturalmente y sin necesidad de intervención humana.
El fenómeno de las «iguanas congeladas» es un recordatorio de cómo las condiciones climáticas extremas afectan a la fauna del sur de Florida.