Una madre cubana, identificada como Ayamey C.N., de 27 años, fue atacada a martillazos en la cabeza, por su expareja, en un intento de asesinato en Bolivia, que dejó a la joven, madre de dos niños, hospitalizada varios días y con severas secuelas en el cráneo, confirmaron medios locales, como el diario de Santa Cruz.
Los hechos ocurrieron, hace dos semanas, en la noche de un domingo en la localidad San José del municipio boliviano de La Guardia. El agresor fue identificado como Juan Carlos Maldonado Cortés, de profesión albañil, de 26 años de edad y que mantenía una relación amorosa con ella hacía más de dos años.
El hombre la atacó salvajemente con un martillo, dándole al menos seis martillazos en la cabeza y luego se dio a la fuga. La ciudadana cubana estuvo varios días hospitalizada
en la capital cruceña, sufriendo hundimiento de cráneo y otras lesiones en la cabeza y la mano. Los gritos de la cubana fueron los que alertaron a su familia, su madre y dos hijos menores, quienes salieron a socorrerla y la encontraron llena de sangre.
Intento de asesinato a cubana en Bolivia
La cubana fue sometida a varias cirugías, mientras la denuncia en contra de su agresor se presentó en la Policía Nacional, que todavía está a la caza de su agresor. El hombre habría atacado a la cubana luego de una discusión porque este llegó borracho a la casa donde ella vivía con sus hijos menores de edad, de 3 y 7 años. Ella estaba durmiendo cuando fue atacada por sorpresa con el martillo.
“Desperté al segundo golpe que me dio con el martillo. Tuve que arrastrarme hasta la puerta para pedir ayuda”, contó Ayamey, la víctima.
El reporte indica que los niños se quedaron traumatizados al verla llena de sangre y con la cabeza hundida, incluso el menor de ellos todavía no se atreve a estar con ella. La mujer estará incapacitada por al menos 50 días, mientras se recupera de las heridas y cirugías, pero se salvará.
Ayamey llegó hace cuatro años a Bolivia, con su madre y sus dos hijos, y se estabilizó en ese país, trabajando como cajera. Hacía poco más de dos años conoció a su agresor, que en un principio fue “muy romántico” con ella, pero que finalmente quiso acabar con su vida.