Autoridades aeronáuticas del Aeropuerto Internacional “José Martí” de La Habana, aseguraron a los medios locales que entre las mejoras previstas para esta terminal destaca la construcción de nuevas oficinas de casas de cambios de divisa o Cadeca, como se les conoce en la isla, para agilizar los trámites de cambios de moneda al arribo de pasajeros.
También está la reparación del finger-12, el puente móvil cubierto que se extiende desde la puerta de embarque de la terminal hasta la puerta de una aeronave. Según especificó a Granma, Manuel López Bello, director general del aeropuerto José Martí, “la ampliación pretende acortar el periodo de espera de los pasajeros e incrementar la atención a su arribo”.
Una de las quejas recurrentes de ciudadanos cubanos y extranjeros que vuelan a la isla versa sobre las malas condiciones estructurales del aeropuerto internacional José Martí de La Habana lo que suele influir en el atraso con la entrega de los equipajes y que causa incomodidades durante la estancia en sus terminales.
Ahora los medios oficiales de la isla dieron a conocer que el sistema de la aviación cubana financió un programa de mantenimiento y reparación de varias de sus instalaciones, para mejorar los flujos de pasajeros en las llegadas y salidas de esa terminal aérea, y las condiciones generales del aeropuerto.
OTRAS REPARACIONES EN EL AEROPUERTO HABANERO
También se repararán los sistemas de clima de las terminales 2 y 3, lo cual permitirá “mantener los niveles de temperatura en los salones de pasajeros en parámetros de confort”, explicaron desde Granma.
Además, las autoridades del aeropuerto precisaron que laboran en “el montaje y puesta en marcha de los cuatro equipos de rayos X de llegada, para la Terminal 2, y se trabaja para dar soluciones al estado de las esteras de equipaje de esa infraestructura”.
En cuanto a la pista principal de la instalación aseguraron que comenzarán mejorando las calles de rodaje, los servicios interiores y las plataformas. Otras obras están relacionadas con la iluminación y con la ampliación de una parte de la Terminal 3, todo ello con recursos financieros propios del sistema de la aviación cubana.