El Aeropuerto Internacional “Ignacio Agramonte” de la central provincia de Camagüey cerró sus operaciones hasta nuevo aviso y como parte de las medidas del gobierno cubano para frenar más contagios, explicó Leudes Escobar Pino, director de dicha terminal aérea.
Según esta información, el cierre será de manera temporal, una vez se han disminuido o cancelado la mayoría de los vuelos que accedían a Cuba por este aeropuerto cubano y la llegada de turistas está prácticamente en cero. El director del mismo también agregó que esta decisión es para apoyar las medidas de aislamientos exigidas por el gobierno de la Isla.
Hasta el cierre, el aeropuerto camagüeyano, recibía en su mayoría vuelos de la aerolínea mexicana Viva Aerobús, con su conexión desde Cancún y habían volado a través de la terminal aérea más de 1200 pasajeros bajo estrictos protocolos sanitarios.
Aunque este no funcionará para vuelos regulares, sí se dijo que continuará entregando cargas no comerciales de personas naturales y además se despacharán los envíos y equipajes no acompañados del municipio cabecera, proceso que iniciará a partir del lunes, 8 de febrero, en el horario comprendido de las 8:00 a.m. a 4:00 p.m. Mientras que en AeroVaradero Camagüey, trabajarán todos los días hasta las 8:00 pm.
Yanile López Díaz, titular del departamento de Procesos Aduaneros, destacó que, cumpliendo con las medidas establecidas, el aeropuerto continuará brindando estos servicios de despacho de carga no comercial, como una extensión al que se realiza en el área de AeroVaradero.
Las personas que deseen conocer más detalles pueden llamar al teléfono 32 26 2110, del Departamento de Atención al Cliente de dicha entidad de cargas.
Hasta mediados de enero, según el semanario local Adelante, hablaba de la limitación de un número importante de operaciones aéreas extranjeras, pero que no obstante todavía llegaban dos vuelos semanales de la aerolínea Viva Aerobús provenientes de Cancún, eso sí, una cifra inferior a las ocho conexiones existentes en igual período del 2020, antes de la crisis sanitaria.
Según explicaba entonces Lexmilán Torralvo Pérez, jefe de control sanitario internacional en Camagüey, el protocolo en dicho aeropuerto exigía la entrega del PCR negativo, en formato impreso y por un laboratorio avalado en el país de procedencia. Incluso, si no se presentaba el resultado el pasajero podía ser regresado a su país de origen o internarse en un centro de aislamiento estatal.
El Aeropuerto Internacional Ignacio Agramonte atendía antes de la crisis sanitaria los vuelos a la ciudad de Camagüey y al polo turístico de Santa Lucía. Cuenta con una pista de aterrizaje de 3000 metros y una elevación de 125 metros. Está situado en Avenida Finlay Km. 7 1/2, de la capital camagüeyana.