Denuncian “peloteos” y ventas de citas para inscribir motos eléctricas en Cuba

A pocos días, del final del plazo para inscribir en Cuba, todo tipo de motos eléctricas, como las llamadas motorinas, varios cubanos denunciaron los “peloteos”, enormes colas y ventas de citas en los registros de vehículos de todo el país.

Según el medio independiente Cubanet, el plazo para regularizar las motos y ciclomotores eléctricos termina con el año, según las autoridades. Los dueños que no hayan obtenido la chapa correspondiente en el Registro de Vehículos (RV) no podrán circular a partir de enero de 2024 y corren el riesgo de perder toda la inversión, en tiempos donde el transporte es un caos en la isla.

Pero sucede que muchos ciudadanos aún no han podido realizar el trámite por las dificultades que presentan las oficinas del RV, la burocracia y la reventa de citas para realizar este trámite.

Le quieren recoger la moto al que no tenga chapa (…) Dicen que no saben, pero que enero viene duro hasta para la gente de las bicicletas”, precisó William Quintero Pupo, citado por el medio, mientras se encontraba en el registro de Arroyo Naranjo.

Inscripción de motos eléctricas en Cuba

Según una fuente anónima de la Unidad de Patrullas en La Habana que habló con CubaNet, los conductores que circulen sin chapa o sin los papeles que demuestren que el vehículo está en proceso de obtenerla se enfrentarán a diferentes sanciones.

La primera vez que sean sorprendidos, recibirán una multa. La segunda vez, les quitarán el permiso de conducir y, la tercera vez, les pondrán una denuncia por desacato y les confiscarán el vehículo. Si no tienen permiso de conducir y ya han sido advertidos por eso, se saltarán el paso de la multa y pasarán directamente a la denuncia y el decomiso de la motorina, explicó el agente del orden.

Al final es por su bien; luego se quejan cuando le roban la moto o la bicicleta, pero, la Policía no puede hacer mucho si ni siquiera tiene cómo identificar los objetos sustraídos”, agregó.

Un gran número de cubanos se desplazan en ciclomotores eléctricos, cifras que superan los 500 mil en la Isla, ante la falta de opciones de transporte público.

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