La epidemia mortal del coronavirus de Wuhan, que ya lleva casi 700 fallecidos, desde su aparición mundial, podría afectar los preparativos de Japón para los Juegos Olímpicos de Tokio 2020. De hecho, ahora mismo frente a las costas de Japón, un crucero está varado con más de 60 casos reportados hasta el momento, y todavía no aparece una cura regular para su tratamiento, pues solo se están usando retrovirales, uno de ellos de origen cubano.
El hecho es que los Juegos Olímpicos, están por empezar, apenas cinco meses del evento polideportivo más importante del mundo y Tokio se prepara mientras crecen los problemas para disputar los últimos torneos clasificatorios. Wuhan, el epicentro del brote del virus, está a unos 2400 kilómetros de la capital nipona, y esa acumulación de personas, además en un período de intenso calor, es un problema de envergadura mayor.
El virus ha infectado a más de 31 mil personas en más de 25 países y territorios, la gran mayoría de los casos en China continental, pero Asia está atenta, ante cualquier brote de magnitud en otro país de la zona. En Japón por ejemplo se han reportado al menos 86 casos.
“Estoy extremadamente preocupado de que la propagación de la enfermedad infecciosa pueda arrojar agua fría sobre el impulso hacia los Juegos, dijo Toshiro Muto, director ejecutivo del comité organizador de los Juegos Olímpicos de Tokio, según la emisora pública japonesa NHK. “Espero que se elimine lo antes posible”, prácticamente suplicó. Sin embargo, el primer ministro Shinzo Abe declaró el lunes que los Juegos continuarían según lo planeado.
Varias aerolíneas además han dejado de volar hacia varios países asiáticos. La holandesa KLM suspendió temporalmente todos los vuelos a China continental como resultado del brote de coronavirus, al menos hasta el 16 de marzo. Air France también extendió su suspensión a Shanghai y Beijing, que comenzó a finales de enero, hasta el 15 de marzo.