A partir de enero de 2025, España implementará una nueva alternativa para que los residentes sin familiares directos puedan acceder a la nacionalidad española.
Esta medida, de carácter graciable, no se ajusta a las Normas Generales de Procedimiento Administrativo, ofreciendo una vía más inclusiva para quienes han establecido vínculos sólidos con el país.
Requisitos para Obtener la Nacionalidad Española por Residencia
Para optar a esta modalidad, los solicitantes deberán cumplir con los siguientes requisitos fundamentales:
- Residencia legal y continuada:
- 10 años: Período general para la mayoría de los casos.
- 5 años: Para personas con condición de refugiado.
- 2 años: Para ciudadanos de países iberoamericanos, Andorra, Filipinas, Guinea Ecuatorial, Portugal o de origen sefardí.
- 1 año: En casos específicos como:
- Haber nacido en territorio español.
- No haber ejercido el derecho a adquirir la nacionalidad por opción.
- Haber estado bajo tutela legal de un ciudadano o institución española.
- Haber estado casado durante un año con un ciudadano español, sin separación legal o de hecho.
- Viudez de un ciudadano español sin separación al momento del fallecimiento.
- Ser hijo o nieto de españoles originarios nacidos fuera de España.
- Buena conducta cívica: No tener antecedentes penales ni policiales.
- Integración: Demostrar una adecuada integración en la sociedad española, lo que puede ser evaluado mediante entrevistas o pruebas específicas.
Detalles Clave del Proceso para la nacionalidad de España
Durante el período de residencia requerido, el solicitante no podrá ausentarse de España por más de tres meses consecutivos. Las solicitudes se podrán presentar en las entidades establecidas por la Ley 39/2015 o gestionarse de forma electrónica mediante un formulario en línea. Es necesario adjuntar documentación que respalde el cumplimiento de todos los requisitos.
Según el Ministerio de la Presidencia, Justicia y Relaciones con las Cortes, esta medida busca reconocer el vínculo jurídico entre una persona y el Estado español, otorgando derechos y obligaciones. La nueva opción permite que quienes no tienen familiares directos en España, pero han residido de forma prolongada y demostraron su integración social, puedan acceder a la nacionalidad española, fortaleciendo los lazos con la comunidad.
Este cambio legislativo representa un avance en la inclusión y facilita el acceso a la nacionalidad a una población diversa que contribuye al desarrollo de España.