Desde que se acabó la ley de “pies secos, pies mojados” para los cubanos en Estados Unidos, han disminuido muchos las salidas ilegales en embarcaciones rumbo a la Florida, cuando ese siempre ha sido el “modus operandis” para los cubanos de llegar a tierra norteamericana.
Luego de ese suceso, la manera ha sido por tierra, buscando atravesar Centroamérica hasta solicitar refugio en la frontera mexicana. No obstante siguen saliendo embarcaciones de la Isla y la prueba de ello es que la Guardia Costera de ese país sigue interceptando embarcaciones antes de tocar suelo norteamericano.
Esta fue la primera del año 2020 y en la misma viajaban nueve cubanos, a 25 millas al sureste de Tavernier Creek, en el estado de la Florida.
Según informó dicha entidad de salvaguarda marítima de los Estados Unidos uno de los cubanos ilegales fue puesto bajo la custodia de Aduanas y Protección Fronteriza después de ser llevado a tierra para recibir atención médica «más avanzada», por su mal estado de salud.
El operativo se produjo el pasado jueves 2 de enero después que los vigilantes del sector de Key West recibieron un aviso sobre la presencia de una embarcación de migrantes. Por este motivo pusieron en marcha una operación en la que lanzaron un bote de 45 pies y desviaron a la tripulación del Guardacostas Charles Sexton (WPC-1108) para que interceptara la embarcación.
La tripulación del Guardacostas detuvo a la embarcación y embarcó a los migrantes, ocho de los cuales ya fueron repatriados este fin de semana a Cuba «de forma segura», como aseguró la institución costera. Se supone que los mismos hubiesen salido de la Isla desde la madrugada del primer día de 2020. Se trata del primer arribo de migrantes cubanos notificados este año. La Guardia Costera detalló que desde octubre de 2019 se han interceptado cerca de 52 cubanos intentando llegar a las costas de la Florida. La cifra no es considerable comparada con otros años, pero sigue demostrando que el flujo vía marítima tampoco se detiene.