El gobierno de Islas Caimán acaba de declarar que la ola de balseros cubanos a Estados Unidos es un “problema regional” y está experimentando los niveles más altos de migración irregular desde el llamado éxodo del Mariel. Actualmente, la ola migratoria es tanto por tierra, a través de Nicaragua, como por mar.
A través de un comunicado oficial, las Islas Caimán advierten que ellos también están experimentando algunos de los niveles más altos de migración irregular en la historia reciente, con 173 inmigrantes cubanos actualmente dentro de las Islas Caimán y administrados por el Servicio de Control de Aduanas y Fronteras (CBC) y el Comité de Migración Masiva.
“Las Islas Caimán experimentaron una crisis migratoria masiva en 1994, con la llegada de aproximadamente 1100 inmigrantes cubanos en un período relativamente corto. Con el creciente número de inmigrantes cubanos irregulares que llegan a nuestras costas ahora, la situación tiene el potencial de abrumar nuestros servicios, lo que podría crear desafíos de seguridad nacional”, dijo el director de CBC, Charles Clifford.
En abril de 2015, el gobierno de Islas Caimán firmó un Memorando de Entendimiento con Cuba en materia migratoria e introdujo cronogramas acordados para el intercambio de información entre los dos gobiernos. Sobre todo para acortar el tiempo entre la llegada y la repatriación de los migrantes cubanos.
Esto garantizaría además que los migrantes puedan regresar con sus familias sin demoras indebidas. Los tiempos de respuesta más breves reducirían los costos que implica alojar a los migrantes durante un período más largo. Sin embargo, el proceso de repatriación a veces se retrasa debido a desafíos legales, dicen desde Caimán.
MIGRANTES CUBANOS EN ISLAS CAIMÁN
En 2021, el gobierno de Islas Caimán gastó más de 900 mil dólares en la gestión de los migrantes cubanos. Para el primer y segundo trimestre de 2022, ya se ha gastado la mitad de ese dinero. Si continúa la tendencia actual de llegadas, será necesario aprobar fondos adicionales para respaldar la asignación inicial de este año, que era menor de 800 mil. Todo eso, son gastos para un gobierno ajeno a la crisis de Cuba.
Con base en los cambios en las políticas de inmigración de Estados Unidos, se espera que continúe la actual tendencia al alza en las llegadas de inmigrantes irregulares y, por lo tanto, las Islas Caimán también pueden esperar ver llegar más balseros cubanos, que se han convertido en un problema para ellos.
Finalmente, advierten que el Comité de Migración Masiva continuará reuniéndose y monitoreando la situación, ya que tiene serias implicaciones financieras, operativas y de infraestructura. Por lo tanto, las políticas para el manejo de migrantes irregulares están actualmente bajo revisión y podrían variar.