Si en el norte de los Estados Unidos preocupa Nueva York con cifras escandalosas de contagios, en el sur, un estado que le preocupa al mandatario Donald Trump es la Florida, que ya tiene más de 4 mil casos de la nueva pandemia global. Y dentro del estado floridano, el condado de Miami se desata como posible epicentro de la enfermedad.
Para Cuba esta tampoco son buenas noticias, si bien la mayoría de los residentes emigrados que siguen llegando a la Isla a pesar de la crisis, son los que residen en Miami, un condado que por sí solo tiene más de mil casos confirmados. Dada la mayoría de población cubana que reside en ese país, la preocupación aumenta.
De hecho el primer cubano fallecido por la crisis sanitaria actual, fue un cubano, residente en Miami-Dade. Israel Carrera, un hombre de 40 años procedente de Cuba que llevaba cuatro años viviendo en Miami, fue el desafortunado, pero si no se toman las medidas necesarias y más estrictas, bien pudiera incrementarse la tragedia.
El posible desatador de los contagios en Miami sería el Winter Party Festival en Miami Beach a principios de marzo. El cubano fallecido estuvo allí, antes de empezar a sentirse mal. Nueve personas que asistieron al festival han dado positivo a la prueba de la pandemia. Y se esperan muchas más de las que hayan asistido al evento.
Sucede que la Florida tiene hoy más de 4 mil casos, según informes del Departamento de Salud emitidos este sábado, y de ellos los condados de Miami-Dade y de Broward registraron una muerte adicional cada uno.
En total, el estado ha registrado 4038 casos positivos, lo que representa un incremento de 840 casos nuevos en las últimas 24 horas. También se confirmaron el sábado ocho muertes adicionales en el resto del estado, elevando el número de fallecidos a 56.
Otra de las fallecidas en Miami-Dade, la tercera muerte, fue Araceli Buendía, veterana enfermera del Hospital Jackson Memorial de Miami. La enfermera de 63 años trabajaba en la unidad de cuidados intensivos del hospital, y llevaba más de tres décadas atendiendo pacientes en dicho centro médico.
Buendía es la segunda empleada sanitaria en el sur de la Florida que fallece por complicaciones con la enfermedad del momento y la segunda enfermera del Jackson Health en dar positivo a la enfermedad en marzo.
Más de la mitad de los 4038 casos confirmados en el estado —2202— se diagnosticaron en los condados Miami-Dade, Broward y Palm Beach, lo que significa que el sur de la Florida se ha convertido en el epicentro estatal de la epidemia.
El Departamento de Salud de Florida confirmó la existencia de 252 casos nuevos en Miami-Dade en su informe del sábado, elevando el total de pacientes en el condado a 1121. En Broward, se sumaron 189 casos, lo que lleva la cifra total de casos en ese condado a 820. En Palm Beach se confirmaron 77 casos adicionales, para un total de 318.
Desde el miércoles pasado, cinco comisionados de Miami votaron de forma unánime para imponer un toque de queda de 10 de la noche a 5 de la mañana. Durante el toque de queda, la policía puede parar, interrogar y arrestar a cualquier persona que esté en la calle. No obstante estas siguen siendo medidas menores, si bien el virus no sabe de horarios para propagarse. La cuarentena sigue siendo a medias y eso no es una manera de parar la epidemia según ratifican los expertos, y países en medio de la crisis como Italia y España lo han demostrado.
Por favor,q paren esos vuelos hasta q esta pandemia pase. Hay q tomar medidas drásticas por el bien de todos.