La ola migratoria de cubanos rumbo a la frontera de Estados Unidos está siendo indetenible a pesar de las restricciones que poco a poco le van imponiendo países y aerolíneas rumbo a Nicaragua, el país que desde noviembre no pide visado y se ha convertido en el trampolín rumbo a la frontera de Estados Unidos.
A finales de 2022, el número de cubanos que llegan a la frontera entre Estados Unidos y México podría llegar a niveles históricos. Ya la cantidad que cruzó la frontera en marzo superó a los que llegaron desde Centroamérica, según datos internos de Aduanas y Protección Fronteriza de ese país.
El promedio semanal para los cubanos que cruzan la frontera sur de Estados Unidos a finales de marzo, por ejemplo, fue de 1200 personas, un 460 por ciento más que el año pasado, en la misma fecha. En todo el mes de marzo, al menos 32 mil cubanos fueron puestos bajo custodia estadounidense a lo largo de la frontera con México. Un mes ants fueron más de 16 mil.
Altos funcionarios del Departamento de Seguridad Nacional de Estados Unidos dicen que en gran medida no pueden deportar a los cubanos desde ese país norteño porque el gobierno cubano se niega a aceptarlos. Mientras dentro de la isla se lidia con la escasez de alimentos y medicinas.
El gobierno cubano dice que aboga por la migración legal, mientras culpa a Estados Unidos por el aumento de la migración y dice que las sanciones económicas en curso, así como el cierre de la sección consular de la Embajada en Cuba, alientan a sus ciudadanos a salir del país.
Desde mayo próximo, Estados Unidos ha asegurado que reanudará la emisión de algunas visas de inmigrantes, desde que cerró en 2018 luego de misteriosos incidentes de salud. Solo serán visados de migrantes para padres y madres de ciudadanos americanos, pero algo es algo.