No son noticias nuevas, aunque sí recurrentes en la vida diaria de Estados Unidos, la actual potencia económica a nivel mundial, que no significa lo mismo que potencia social. Un reportaje reciente de la conocida cadena norteamericana de TV, CNN, cuestionaba por qué cada día es más creciente el número de norteamericanos que se mudan a Europa a comenzar una nueva vida lejos del estilo americano.
En el reporte, indican que en los últimos años, miles de norteamericanos han cruzado “el charco” rumbo a Europa, especialmente a Italia, España o Portugal, en busca de mayor sosiego por el clima político en EE.UU y por lo barato que les resulta comprarse una casa en esos países, en comparación con lo que pueden adquirir en EE.UU luego de años de ahorros y deudas bancarias.
Pusieron el caso, de una familia afroamericana, los Dawkins, de Texas, conformada por Nadine, de 59 años, Kim, de 61, y sus hijos adultos, que se mudaron a una pequeña localidad italiana nombrada Latronico. También de una pareja LGBT+, Alan Andrew, de Pensilvania, y su marido belga, Vincent Proost, quienes compraron una granja en Alentejo, Portugal.
Norteamericanos se mudan a Europa: ¿por qué?
A partir del año que viene, inicios de 2024, los norteamericanos tendrán que pagar una tarifa de 7,70 dólares, con el nuevo programa de exención de visados ETIAS, para poder entrar a Europa. Antes lo hacían de manera gratuita, pero desde el próximo año las cosas cambian. Como mismo EE.UU solicita el ESTA a los europeos, ahora estos pedirán el ETIAS. No obstante, siempre viajarán de a millones, porque los múltiples atractivos de Europa, no dejan lejos a nadie.
Una de las razones, por la que los norteamericanos se mudan a Europa, tiene que ver con eso, la facilidad de viajar a sitios culturales, patrimoniales, en corto tiempo. También su exquisita calidad de vida, donde el enfoque no está en “vivir para trabajar”, sino en “trabajar para vivir”.
Europa tiene un alto nivel de bienestar, con sistemas de salud y educación públicos de primer nivel. Algo que es sumamente atractivo para los norteamericanos y sus familiares. El “Viejo Continente” se ha vuelto irresistible para los norteamericanos, con temas que van desde la seguridad, la rica historia, diversidad cultural hasta la calidad de vida y la oportunidad de viajar por diferentes naciones en corto tiempo.
“Me mudé a Europa hace siete años. Nuestra motivación al principio era tener hijos sin endeudarnos. Después de vivir aquí un tiempo, pudimos comprar una casa y vivir un estilo de vida que alguna vez se consideró el sueño americano”, contó al respecto un norteamericano.
Más de 10 millones de norteamericanos viven fuera de Estados Unidos y muchos miran a Europa como su segunda oportunidad para empezar desde cero.
