La estatal Russian Railways (RZD) suspendió temporalmente el proyecto sobre la modernización de los ferrocarriles de Cuba a la luz de las restricciones relacionadas con la crisis económica y la desafiante situación económica en dicha nación, amplió la revista rusa Sputnik.
Este martes, 28 de diciembre, el primer subdirector gerente de RZD, Sergey Pavlov, agregó a los medios rusos que la compañía planea reanudar el proyecto una vez que la situación sanitaria se estabilice.
“Lamentablemente, debido a la difícil situación económica y las restricciones de cuarentena en Cuba, nos vimos obligados a suspender temporalmente nuestro proyecto para una modernización integral de la infraestructura ferroviaria en la isla. Pero esperamos reanudar el trabajo en el proyecto una vez que la situación se estabilice «, dijo Pavlov al periódico corporativo de RZD, Gudok.
En octubre de 2019, el RZD y La Habana firmaron el acuerdo de 2,3 mil millones de dólares para la restauración y modernización del ferrocarril de Cuba. El acuerdo prevé el diseño, la restauración y la modernización de más de 600 millas de la infraestructura ferroviaria utilizando tecnologías y equipos rusos.
Además, el proyecto contemplaba la creación de un único centro de control de tráfico para monitorear los movimientos de trenes y la educación del personal cubano en las universidades rusas al respecto.
Hace apenas una semana llegaban a la Isla las últimas locomotoras rusas para este proyecto que finalmente queda detenido hasta nuevo aviso. Arribó un lote de siete locomotoras TGM-8KM fabricadas por la empresa rusa Sinara, en total deben llegar a Cuba en el año venidero, 75 máquinas.
“El resultado es que las otras 53 locomotoras que forman parte de este contrato y que ya se explotan en Cuba, participan en los principales tráficos de transportes del ferrocarril”, dijo el ministro cubano de Transporte, Eduardo Rodríguez.
Ya entonces, la parte cubana en el proyecto había señalado que extendía los plazos y reorganizaba los proyectos, pero la voluntad y continuidad del mismo se mantenía vigente en 2021, por lo cual se seguiría “trabajando en esa dirección».
«Lamentablemente es la única entrega de locomotoras este año, pero estamos seguros de que el año próximo será más fructífero, porque según el contrato deben fabricarse y enviarse a Cuba 75 locomotoras (60 ya en la isla), así que los planes de colaboración son importantes en la esfera de los ferrocarriles, no solamente con Sinara, sino con otras importantes empresas rusas que tienen proyectos y esperan continuar desarrollándolos”, señaló a Sputnik, el representante comercial de Rusia en Cuba, Alexander Bogatyr.
En febrero de este año, la Federación de Rusia y Cuba acordaron nuevas inversiones bilaterales por valor de alrededor de mil millones de euros.
Además, el programa de inversiones, que se basa en la conversión de viejas deudas cubanas y que cerca de la mitad se financia con préstamos bancarios rusos, también tiene como objetivo beneficiar a otros sectores. Rusia quiere modernizar la acería «Antillana de Acero» y renovar varias centrales eléctricas de la era soviética. Esto mejoraría significativamente la eficiencia energética de la producción de electricidad, lo que debería hacer a Cuba menos dependiente de las importaciones de petróleo. Actualmente, la isla genera alrededor del 80 por ciento de su energía eléctrica con combustibles fósiles. La carga base la soportan las centrales eléctricas de petróleo pesado de Rusia.