Cerca de una docena de aseguradoras de viviendas en Florida se han declarado como insolventes en estos últimos dos años, según revelan los datos de la Oficina de Regulación de Seguros de la región, situación que pudiera agravarse tras el impacto reciente del devastador huracán Ian.
De acuerdo con los cálculos de la entidad, cientos de miles de propietarios se encuentran solicitando actualmente un seguro que les permita proteger sus viviendas, muchos de ellos residentes de zonas propensas a inundaciones.
Un reporte de Diario Las Américas arroja que las tarifas primas de seguro rondan por los 4.000 y 6.000 dólares anuales, sumado a los altos impuestos a la propiedad y las facturas regulares de agua o electricidad.
El medio citado advierte que las aseguradoras existentes, incluyendo la estatal Citizens, se encuentran evaluando el impacto del organismo meteorológico con el fin de determinar cómo hacer frente a las pérdidas multimillonarias derivadas.
El propio senador estatal republicano Jeff Brandes aseguró a The Washington Post que “el huracán trae un gasto de miles de millones de dólares, y con el sector de seguros ya derrumbándose, esto va a ser devastador”.
AUMENTO DE COSTO DE SEGURO DE CASAS EN FLORIDA
Por su parte, Sean Kevelighan, director ejecutivo de la firma reguladora Triple-I declaró en un comunicado que “los floridanos ven que los seguros de viviendas se vuelven más costosos y escasos porque durante años Florida ha sido lugar de demasiados litigios y demasiadas situaciones fraudulentas sobre supuestos daños a los techos”. Toda esta situación condujo a pérdidas netas entre 2017 y 2021.
En tanto, las cifras no resultan para nada alentadoras, ya que, desde hace un año atrás, las primas de los seguros de viviendas se incrementaron en Florida en un 25 % sumado a que “tres cuartas partes de los 21,5 millones de habitantes viven en zonas costeras”, según registra el censo realizado en el año en transcurso.
Un informe reciente destaca que la actual crisis se debe, fundamentalmente, a que el mercado de Florida se encuentra dominado por aseguradoras muy pequeñas, además del amplio historial de estafas y fraudes que perjudican directamente a las compañías de seguros.