El coronel Mario Méndez Mayedo, jefe de la Dirección de Identificación, Inmigración y Extranjería del Ministerio del Interior, precisó en el programa televisivo cubano Mesa Redonda que desde este 7 de abril no existirá en Cuba algún turista extranjero con menos de 15 días de estancia en el país. Lo que asegura según ellos, que el período de incubación del virus, de tenerlo, ya haya generado sus síntomas.
Méndez también puntualizó que existen 8 466 extranjeros residentes de forma permanente, así como otros 23 000 con estancia temporal (estudiantes, diplomáticos o periodistas).
En Cuba se mantienen 13 mil 496 visitantes del extranjero. Igualmente en el mundo se encuentran 478 mil 466 cubanos, de ellos 447 mil 466 por asuntos particulares y 31 mil en misiones oficiales.
Méndez igualmente informó que existen en Cuba 1 737 extranjeros alojados en casas de familiares, un aspecto permitido por las leyes del país, y comentó también que se trabaja con el Ministerio de Relaciones Exteriores y el Ministerio de Turismo en función de evacuar a quienes quedaron varados en Cuba por el cierre de fronteras de sus países y de la propia Isla, que sin embargo permite los vuelos humanitarios, como serían en estos casos.
Para este último aspecto es vital la concentración de los extranjeros en los hoteles, de manera que a la hora de regresar a sus naciones estén ubicados en un mismo sitio. En la Mesa Redonda se añadió que hasta este 6 de abril existían en el país 569 extranjeros en hostales, pero cuando comenzó el plan de enfrentamiento a la pandemia permanecían 14 mil bajo esta modalidad de alojamiento en la Isla.
Por ejemplo, se supo que la mayor parte de los 815 turistas españoles que aún quedan en Cuba ha decidido permanecer en la isla debido a sus vínculos familiares o sentimentales en este país, por lo que pese al cierre total de fronteras que entra en vigor mañana jueves, no se puede considerar que se encuentren «varados».
El embajador español en La Habana, Juan Fernández-Trigo, explicó a la agencia EFE que prácticamente todos los turistas que han querido volver a España ya lo han hecho, y puso como ejemplo las más de 300 plazas que quedaron libres en los tres últimos vuelos de Iberia entre la capital cubana y Madrid.
Los turistas españoles que quedaron en Cuba, según palabras del embajador, «son personas que tienen ciertos contactos familiares y que por tanto, aunque entran y son registrados como turistas, en realidad tienen unas condiciones de residencia un tanto particulares».
Aunque esas personas entran a Cuba con visado de turista, no se trata del perfil de una persona usual que viene a Cuba de vacaciones. Sucede que en muchos casos tampoco cumplen los estrictos requisitos de las autoridades cubanas para conceder un permiso de residencia temporal o permanente, pero sí existen vínculos familiares fuertes. El 17 de marzo había en Cuba 2.435 turistas españoles. Poco más de la mitad decidieron regresar a España, los otros decidieron pasar la pandemia en la Isla.
Cuba tiene bajo estricta vigilancia epidemiológica a los extranjeros, que como ya se alerta tienen más de 15 días de estadía en la Isla.
Recientemente un canadiense, Michael Glosheter, de 57 años de edad, fue dado de alta en Holguín, tras ser tratado en la Isla con la epidemia. Al salir del centro médico rumbo al aeropuerto internacional Frank País, de donde partió hacia Canadá, dejó su mensaje de agradecimiento por las atenciones médicas recibidas. El canadiense fue diagnosticado con la enfermedad en el Río de Oro de la ciudad de Holguín. Otro turista croata fue dado de alta en la ciudad de Matanzas.