Desde hoy entran en vigor los precios topados para el arroz y los frijoles en Cuba: ¿se respetará la medida?

Desde este miércoles, comienza a regir en Cuba la regulación temporal de los precios máximos para el acopio y la venta minorista del arroz y el frijol de producción nacional.

La medida, establecida en el Acuerdo 10093 del 5 de marzo de 2025, fue publicada en la Gaceta Oficial No. 7 (extraordinaria) y busca contener la inflación en estos productos esenciales.

¿Cómo quedan los precios regulados?

El Ministerio de Finanzas y Precios (MFP) fijó precios máximos tanto para la compra a productores como para la venta en mercados minoristas:

  • Arroz: Hasta 110 pesos por libra en acopio y 155 pesos por libra en la red minorista.
  • Frijol:
    • Con insumos estatales: 140 pesos por libra en acopio y hasta 196 pesos en venta minorista.
    • Sin insumos estatales: 200 pesos por libra en acopio y hasta 285 pesos en los mercados minoristas.

El gobierno ha aclarado que esta regulación no sustituye la canasta familiar normada, sino que busca ofrecer una opción de compra adicional a la población.

Confusión e incertidumbre entre la población

Desde el anuncio oficial, muchas personas han expresado dudas y preocupaciones sobre la implementación de la medida. Algunos ciudadanos se preguntan si estos productos estarán disponibles en los mercados estatales y si realmente se respetarán los precios topados en el sector privado.

En redes sociales, un usuario comentó que la canasta normada hace meses no recibe frijoles, lo que ha generado escepticismo sobre el acceso real a estos alimentos. Otros han denunciado que en varios mercados los precios siguen muy por encima de los topes anunciados.

“Acabo de comprar frijoles a 370 pesos y cuando reclamé el precio, me dijeron que les habían dado 20 días para salir del inventario que ya tenían”, comentó un consumidor.

Otro señaló que en un mercado en Santiago de las Vegas los frijoles siguen vendiéndose a 350 pesos la libra, y en La Habana, un punto de venta en La Coronela sigue ofertando frijol negro a 450 pesos y el colorado a 580.

¿Podrá el gobierno hacer cumplir la regulación?

El control de precios en Cuba ha demostrado ser difícil de aplicar en la práctica. Las experiencias anteriores han mostrado que, en muchos casos, los productos regulados desaparecen del mercado oficial y terminan vendiéndose en el mercado negro a precios aún más altos.

Varios ciudadanos han expresado su temor de que esta medida termine agravando la escasez en lugar de mejorar la accesibilidad a estos alimentos. “Sabemos lo que va a pasar, lo mismo con lo mismo, se perderán esos productos”, lamentó un usuario en redes sociales.

Además, algunos productores han manifestado su preocupación por la rentabilidad de la producción agrícola. Con precios de acopio limitados, los márgenes de ganancia podrían reducirse, desincentivando la producción de estos cultivos en un contexto donde los insumos agrícolas siguen siendo costosos y difíciles de obtener.

Mercado negro y reventa: la otra cara del problema

Uno de los comentarios más repetidos por los consumidores es la preocupación por la venta ilegal de productos agropecuarios. “Ahora el revendedor se los compra a ellos por saco y todo sigue igual”, comentó un usuario sobre la posibilidad de que la regulación termine beneficiando a intermediarios en lugar de a la población.

También hay dudas sobre la disponibilidad de los productos. “Pero, ¿dónde se podrán comprar? Porque el arroz está desaparecido”, cuestionó otra persona.

Lo que viene: control o escasez

Con la regulación en marcha, las próximas semanas serán clave para evaluar si la medida realmente impacta en los precios o si, como temen muchos, los productos desaparecen de la oferta regulada y reaparecen en el mercado informal a precios aún más elevados.

Mientras el gobierno insiste en que la medida busca proteger a los consumidores, la realidad es que el control de precios no aumenta la oferta de alimentos, y sin una mayor producción nacional, la escasez y la especulación podrían seguir dominando el panorama agroalimentario en Cuba.

Deja un comentario

Salir de la versión móvil