Desde el venidero 12 de marzo Cuba adoptará el horario de verano, tan esperado por la mayoría de los habitantes de la Isla. De esta forma llega a su fin, por ahora claro, el horario normal o de invierno, como también se le conoce. El que rige actualmente se implementa desde el pasado 6 de noviembre.
El cambio se producirá justo a las 12 de la noche del sábado 11 de marzo. En ese momento, los cubanos deberán adelantar una hora sus relojes, de ahí que esa noche dormirán 60 minutos menos.
Sobre el tema, las autoridades de Energía y Minas de Cuba recuerdan que este tipo de modificaciones es una práctica habitual internacionalmente. El objetivo es aprovechar aún más la luz solar y, de paso, ahorrar energía.
No obstante, se insiste en continuar adoptando todas las medidas de ahorro indicadas, tanto en el sector estatal como en el residencial. La crisis persiste a causa de las múltiples averías en las centrales termoeléctrica y la escasez, en ocasiones, de combustible para generar electricidad.
Cuba cambia de horarios desde hace más de medio siglo
La actual práctica de modificar horarios dos veces al año Cuba la ejecuta desde 1963. El de verano, por ejemplo, ofrece muchas ventajas para la vida cotidiana de los residentes en la Isla.
Los niños, en especial, resultan muy beneficiados porque tras salir de la escuela y hacer sus tareas pueden jugar al aire libre. Hasta cerca de las 8 p.m. se pueden realizar actividades dentro y fuera de casa aprovechando la luz solar.
Unas 90 millas al norte de la Isla, en Estados Unidos, también se modificará el horario. Desde el propio 12 de marzo sus habitantes adelantarán una hora a sus relojes sobre las 2 de la madrugada. La mayoría de los estados del país realizarán esta práctica.
Sin embargo, en algunos territorios continuará activo el horario normal. Se trata de Hawaii y gran parte de Arizona. Tampoco adelantarán sus relojes los residentes en Puerto Rico, Islas Vírgenes, Islas Marianas del Norte, Guam y Samoa Americana.