A raíz de las recientes reuniones sobre temas financieros entre Cuba y Rusia, este último sugirió al Banco Central de la Isla crear su propia criptomoneda. Se trataría de introducir un peso digital puramente cubano con el objetivo de brindar mayor fluidez a la economía del país.Según Rusia Today, altos ejecutivos de ambas naciones se reunieron para trazar vías de desarrollo a corto plazo de la economía cubana. Este fue el caso del reciente encuentro liderado por el comisionado presidencial ruso para la Protección de los Derechos de los Empresarios, Boris Titov. La parte cubana estuvo representada por la presidenta del Banco Central, Marta Sabina Wilson González.
La idea es crear un centro, sin sucursales, que permita a Cuba concretar transacciones nacionales e internacionales de una forma más fácil. Otro beneficio sería garantizar un flujo de dinero seguro y organizado desde el exterior del país.
Tecnología blockchain en Cuba
El entorno digital planteado para emplear la tecnología blockchain daría, de manera automática, mayor dinamismo y fluidez a la economía cubana. Claro, para lograr eso el propio Banco Central tendría que emitir su criptomoneda y el nuevo banco digital ser el principal comprador. Un “enroque” imprescindible para lograr el éxito deseado.
¿Cuáles serían los primeros pasos?
Inicialmente el peso digital cubano debería vincularse con alguna divisa importante a nivel mundial. Es cierto, crearía varios mercados pero es una estrategia ideal para atraer inversiones, según Titov y su equipo de trabajo.
El código QR jugaría un papel protagónico en este giro de timón en Cuba. Por ejemplo, el banco digital controlaría el flujo de divisas, o sea la compra y venta, mediante una apk para celulares. A su vez, esa aplicación permitiría pagar solo con escanear un QR.
En el caso del turismo, quienes lleguen a Cuba deberán descargar la apk para sus celulares e introducir su dinero en ella. Es un beneficio para todos.
Titov reiteró que este cambio le vendría como anillo al dedo a Cuba porque con esta moneda digital será más fácil comprar en el exterior. «Los riesgos de sanciones en este caso son mínimos. Sin embargo, la criptomoneda en sí no puede utilizarse sin ser cambiada a peso digital», comentó el especialista.
