Desde el mes de enero del presente año la fábrica de almohadillas sanitarias Mathisa, ubicada en la provincia de Sancti Spíritus, no produce. Así se dio a conocer a través de un reportaje publicado por el periódico Escambray.
Según el director de Mathisa, Ángel Pozo González, la paralización de la Unidad Empresarial de Base espirituana se debe fundamentalmente a la falta de polietileno.
Estamos hablando de la única fábrica de almohadillas sanitarias del centro de Cuba. Además, sus producciones abarcan desde la provincia de Matanzas hasta Las Tunas.
Hasta el año 2021, la entidad producía aproximadamente 14 millones de paquetes de almohadillas. Sin embargo este año la cifra pudiera reducirse notablemente.
En este sentido, Pozo González refirió que para 2023 la empresa tiene una planificación de 4 millones 500 mil paquetes de almohadillas. “En 2022 tuvimos una mejor situación, pero este año no tuvimos esa suerte”, expresó el director de Mathisa.
Las últimas compras de materia prima que realizó la UEB se hicieron a México. Actualmente, declara el directivo que, las negociaciones con los proveedores para la compra de polietileno ya están hechas.
Sin embargo, falta que el proveedor fabrique la materia prima y se ejecute el envío; y este proceso puede demorar incluso un mes más.
¿Cuándo podría retomarse la producción?
El directivo de Mathisa, declaró a Escambray que probablemente sobre el mes de julio la fábrica de almohadillas sanitarias esté produciendo de nuevo.
Antes de parar, Mathisa había cumplido su plan de producción para el primer trimestre del año con 580 mil paquetes de almohadillas sanitarias.
No obstante, esta cantidad solo benefició a aproximadamente 800 mil cubanas que viven entre Matanzas y Las Tunas. Además, habría que multiplicar el resultado por tres períodos para saber si los cálculos y la producción de Mathisa se ajustaron a la demanda.
Lo cierto es que al término de mayo Mathisa no ha fabricado las íntimas necesarias para todas estas mujeres de la región central del país.
Incluso, la idea de retomar la producción en julio solo se concretaría si se cumple lo planeado. Por tanto, esta compleja situación ha derivado en un lamentable desencadenante: el paquete de 20 almohadillas se vende en el mercado negro en $200.00 CUP.
Eso, sin contar los obstáculos que debieron sortear dichas mujeres durante los meses de abril y mayo tras la ausencia del producto sanitario.
Oye eso, y las que tienen los revendedores en la calle de dónde salen?Lo cierto es que nadie encuentra una solución a este problema,quien le pone el cascabel al gato?