El gobierno cubano considera un éxito la experiencia del supermercado 3ra y 70 en La Habana y planea replicar el modelo en todas las provincias del país.
A través de Cimex y Tiendas Caribe, se implementará la expansión de estos comercios que operan exclusivamente en dólares, con el objetivo de captar más divisas y garantizar un mayor abastecimiento.
Un modelo rentable que se extenderá
Durante el programa televisivo Mesa Redonda, altos funcionarios del Ministerio de Economía y del Banco Central de Cuba (BCC) explicaron que la iniciativa busca ampliar la oferta de productos y fortalecer el mercado interno mediante la captación de dólares en efectivo y pagos electrónicos.
Según Yamilé Álvarez Tejo, jefa del departamento comercial de Tiendas Caribe, la tienda 3ra y 70 ha superado las expectativas en términos de ingresos y aceptación popular. “Los clientes han encontrado variedad de productos, desde opciones económicas hasta artículos de alta gama. Además, los precios han sido considerados favorables en comparación con otros mercados, tanto dentro como fuera del país”, afirmó.
Expansión progresiva a todas las provincias
Las autoridades han señalado que hasta un 7% de los supermercados de Cimex y Tiendas Caribe adoptarán este modelo de ventas en dólares en una primera fase. La expansión comenzará en las capitales provinciales y se extenderá gradualmente según la demanda y la capacidad de abastecimiento.
Mildrey Granadillo de la Torre, viceministra primera de Economía y Planificación, subrayó que esta estrategia es parte de un proceso de ajuste financiero que permitirá mejorar la disponibilidad de productos sin depender completamente de la moneda nacional.
“Se ha demostrado que esta opción ayuda a captar divisas de forma más eficiente. Es una medida que permitirá mejorar la disponibilidad de bienes en la red de comercio minorista y garantizar el acceso a productos esenciales”, explicó.
Adaptación al pago en dólares
Uno de los desafíos mencionados en el programa fue la preferencia de los clientes por el pago en efectivo, lo que ha generado dificultades operativas en el control y validación de billetes de alta denominación.
“No se han comportado como quisiéramos”, admitió Álvarez Tejo, refiriéndose al uso predominante de billetes de 100 dólares. “Esto crea un estrés operacional y afecta el dinamismo en las cajas registradoras. Sin embargo, estamos trabajando en mejorar la eficiencia del proceso”, agregó.
Para facilitar las transacciones, se ha reforzado la disponibilidad de terminales de pago electrónico y se han ampliado los métodos digitales de compra, con el fin de reducir la dependencia del efectivo.
El MLC se mantiene como opción de pago
A pesar de los rumores sobre su eliminación, las autoridades aseguraron que las cuentas en Moneda Libremente Convertible (MLC) seguirán activas y que las tarjetas vinculadas a ellas podrán utilizarse en la red de comercios habilitados.
Alberto Javier Quiñones Betancourt, vicepresidente del BCC, destacó que “se mantienen esas cuentas denominadas en MLC y el compromiso de los bancos con sus clientes”. Sin embargo, no se especificó si las nuevas tiendas en dólares permitirán el pago en esta moneda digital.
Un paso hacia la estabilidad económica
Los funcionarios insistieron en que la dolarización parcial es una estrategia temporal que busca estabilizar la economía y generar condiciones para una futura desdolarización. “No podemos imponer una desdolarización forzosa sin haber creado previamente las condiciones necesarias. Este es un paso imprescindible para el equilibrio financiero del país”, explicó Granadillo.
La estrategia de dolarización parcial comenzó en 2024 con la venta de combustible en dólares, seguida de su implementación en otros sectores como farmacias, ópticas y tiendas especializadas en turismo. Ahora, con la expansión de los supermercados en dólares, el gobierno apuesta por consolidar este modelo en el comercio minorista.
Mejoras en el abastecimiento y expansión de proveedores
Las autoridades también anunciaron que se está ampliando la red de proveedores nacionales e internacionales para garantizar un mayor surtido en estas tiendas. Actualmente, 19 proveedores han sido financiados para aumentar su capacidad productiva y se espera sumar más en los próximos meses.
Además, se han establecido asociaciones con inversionistas extranjeros que permitirán una mayor diversificación de los productos disponibles en el mercado cubano.
Expectativas de los consumidores y futuro del comercio en Cuba
El gobierno confía en que la expansión de este modelo ayudará a mejorar el acceso a bienes esenciales y dinamizar la economía. No obstante, la implementación de tiendas en dólares sigue generando incertidumbre entre la población, que se pregunta si esta medida será realmente transitoria o si marcará un cambio definitivo en la estructura económica del país.
Con esta nueva fase de expansión, la administración busca consolidar el comercio en divisas como una solución para captar recursos y fortalecer la oferta de productos en el mercado cubano.