Una caravana de migrantes atraviesa México por estos días con el objetivo de llegar a la frontera sur de Estados Unidos. El grupo partió el pasado 30 de octubre de Chiapas y transita actualmente por la carretera federal 145, en el estado de Veracruz.
Suman cientos los migrantes y solicitantes de asilo de Cuba, Venezuela, Colombia y países de Centroamérica que caminan cada día y noche para cumplir su objetivo. El grupo supera las 800 personas y no cesa en su empeño de arribar, cuanto antes, al municipio de Sayula de Alemán.
Justo este fin de semana varios usuarios en redes sociales dieron cuenta de que la caravana ya estaba en el municipio de Isla, en Veracruz. Allí, la Secretaría de Salud estatal les entregó agua y medicamentos a los migrantes. En el grupo viajan menores de edad, embarazadas, personas de la tercera edad, entre otros.
Protección Civil y otras fuerzas mexicanas abren paso
La caravana está protegida a su paso por las fuerzas del orden mexicanas. Los migrantes son resguardados por personal de Protección Civil, Fuerza Civil, la Guardia Nacional, efectivos de la Policía Municipal y Personal de Salud.
La distancia es sumamente larga como para mantener el ritmo deseado, soportar el cansancio y llegar rápido a la frontera. Sin embargo, los integrantes de la caravana han declarado a varios medios de prensa que van a continuar su travesía hasta llegar a la frontera sur estadounidense.
Si de migrantes cubanos se trata, el 7 de diciembre último fueron arrestadas 39 personas. Todas estaban escondidas en una casa en la bahía de Paredón, Tonalá, estado de Chiapas.
Justo un día antes, un grupo de agentes federales de migración y elementos de Grupos Beta del Instituto Nacional de Migración (INM) ingresaron al lugar. En su interior encontraron 155 migrantes extranjeros, de ellos 39 eran cubanos, y el resto de China, Costa Rica, República Dominicana, Ecuador, Guinea, Honduras, Nicaragua, El Salvador y Senegal.
