A pesar de que el poderoso huracán Eta, actualmente con categoría 4 en la escala Saffir-Simpson, se encuentra bien alejado de la geografía insular cubana las bandas de nublados asociadas se dejan sentir en parte del territorio nacional; sin embargo, el mayor peligro podría derivarse de una afectación directa del meteoro, de llegar a describir una marcada curva en su trayectoria y alojarse luego en aguas al sur de Cuba.
No en vano el Centro de Pronósticos del Instituto de Meteorología de Cuba (INSMET) sigue muy de cerca el comportamiento de este organismo ciclónico, y atendiendo a las condiciones atmosféricas reinantes no descarta una afectación directa del huracán, como sugieren algunos modelos de pronósticos.
El doctor José Rubiera, el más reconocido de los meteorólogos de la isla, aseguró en el noticiero de la Televisión Cubana que el fenómeno requiere un seguimiento constante: “Por varios días hemos estado diciendo que un huracán al sur de Cuba en esta época del año, mes de noviembre hay que observarlo muy bien”.
“El caso es que los modelos de pronósticos hoy están dando un lento movimiento en los territorios de Nicaragua y Honduras, pero sacándolo al Golfo de Honduras para el viernes, y esta sería otra situación, porque observen ustedes como las trayectorias han ido cambiando hacia el norte”, indicó Rubiera, en referencia a un haz de trayectorias que tienden a ubicar a Eta al sur de Cuba para fines de semana.
El especialista explicó a la teleaudiencia que se pronostica un lento traslado sobre Centroamérica, un lapso de tiempo en el que también podrían cambiar las condiciones atmosféricas sobre las aguas del Caribe, lo cual complejiza mucho más cualquier pronóstico ahora mismo.
“Lo que pasa es que todavía hay una inseguridad tremenda en eso, faltan muchos días, y es a partir del viernes que una cosa como esta pudiera ocurrir o no. Y habría que ver qué pasa si sale como un sistema más débil o más fuerte, hay muchas variantes y por eso decimos que vamos a seguir observando cuidadosamente esta situación meteorológica al sur de Cuba.
A partir del cono de trayectorias que maneja ahora mismo el Centro Nacional de Huracanes de EEUU (NHC), para el domingo próximo Eta estaría internado al sur del Mar Caribe, justo debajo de la mayor de las Antillas, momento en que pudiera ganar nuevamente en organización e intensidad dadas las temperaturas cálidas de las aguas.
“Desde Cuba vigilaremos el sistema atmosférico, considerando la época del año, el desarrollo de La Niña y lo que sugieren los más confiables modelos de predicción. No pensar que con la aproximación o el arribo de un frente frío o la incidencia de masas de aire fresco en el último mes de la temporada ciclónica disminuye el peligro en el área. Otros huracanes poderosos que han existido en noviembre: Lenny, Michelle y Paloma (todos de categoría 4), y el de Santa Cruz del Sur, que fue de categoría 5”, recordaba hoy Cubadebate.
El huracán ha descrito un desarrollo admirable en los últimos días, pues solo se tardó 24 horas para pasar de la categoría de tormenta tropical a convertirse en un huracán categoría 4 antes de impactar en las costas de Nicaragua, como sucedió hace apenas unas horas.
Se trata de la 28 tormenta con nombre, empatando el anterior récord de 2005, en cuanto a la cantidad de tormentas con nombre para una misma temporada ciclónica.
De momento transita sobre Nicaragua, y los expertos aseguran que podría convertirse en uno de los peores eventos de inundación que ha vivido Nicaragua, desde el paso del huracán Mitch en el año 1998, fenómeno que le cobró la vida a más de 10 000 personas.