Mientras Cuba enfrenta todavía una severa escasez de café que ha afectado a la población durante varios meses, autoridades santiagueras anuncian que la provincia de Santiago de Cuba, la mayor productora de café en la isla, tributará alrededor de 4000 toneladas del grano en la presente cosecha.
La noticia, ofrecida al Semanario Sierra Maestra por Jorge Luis Rondón Borges, Jefe del programa cafetalero en esa provincia, plantea no pocas interrogantes respecto a la producción y distribución del producto.
En un país donde el café es un elemento esencial de la vida cotidiana y la cultura, la falta de este producto durante 5 meses en las bodegas de la isla ha sido una fuente constante de descontento entre la población.
Las autoridades cubanas han señalado como causa fundamental de la escasez de café los bajos niveles productivos del grano. Y aunque existen planes estratégicos para producir 30 mil toneladas en 2030, lo cierto es que ahora mismo el país no logra asegurar ni siquiera el café de la venta normada.
Jorge Luis Rondón Borges señala que, con la excepción del municipio de Mella, todos los territorios de la provincia de Santiago de Cuba están involucrados en la producción de café. El directivo se refiere a los avances del territorio y asegura que ahora mimo el despulpe y secado, marchan a buen ritmo en la provincia, pero, ¿se está destinando la cantidad adecuada a satisfacer las necesidades de la población?
Hace poco más de una semana se divulgó que la reconocida marca italiana Lavazza lanzó su café premium Tierra Cuba, producido con semillas selectas cultivadas por 170 agricultores de las zonas montañosas de Santiago de Cuba y Granma. Según indicaron, el producto cuenta con un 65% de la variedad Arábica Turquino de Cuba.