Transporte en Cuba: de mal en peor

La situación del transporte de pasajeros en Cuba durante los últimos años ha estado caracterizada por un deterioro progresivo de sus capacidades e infraestructuras.

Lo cierto es que el panorama actual se torna en extremo difícil para los miles de pasajeros que diariamente enfrentan esta crisis de transportación.

No son pocas las pérdidas de las empresas estatales que deben ser, al fin y al cabo, las que ostenten los precios más asequibles. Por ello, ahora mismo los servicios públicos no cubren ni de cerca una pequeña parte de la demanda.

En este sentido, las empresas operadoras que prestan servicios de transportación poseen una desesperanzadora situación financiera y tampoco cubren los gastos directos de la actividad. Pero, en medio de todo este contexto, las formas de gestión no estatal, cobran precios que son solo asequibles para una parte de la población.

¿Cómo se han pronunciado las autoridades cubanas al respecto?

El ministro de Transporte en Cuba, Eduardo Rodríguez Dávila precisó públicamente a los ciudadanos, a través de la prensa, las causas de tan compleja situación.

Entre ellas destacó la insuficiente disponibilidad de moneda libremente convertible para adquirir piezas de repuesto, agregados y componentes para mantener y reparar los medios.

Asimismo, expresó que las transportaciones públicas requieren todos los años más de 40 millones de dólares sólo para su mantenimiento, sin mencionar las inversiones.

Rodríguez Dávila insistió también en las dificultades en la disponibilidad de combustibles, como otro de los factores que ha incidido negativamente en las transportaciones. “A veces tenemos el medio, pero no el combustible para hacerlo funcionar”, expresó el ministro.

En Cuba, para nadie es un secreto la deficiente regulación de los precios que cobran los diferentes actores económicos estatales y no estatales.

Por ende es lógico que el déficit de oferta de la transportación estatal haya hecho más relevante la participación no estatal. Esto se traduce en una menor oferta de servicios y una gran insatisfacción del pueblo.

Lo cierto es que a raíz de esta crisis de transportación se incrementa el incumplimiento de horarios y desvíos de rutas. Entre tanto continúa siendo el pueblo el más afectado; las compras ilícitas de pasajes, excesos de velocidad y el maltrato a pasajeros son ejemplos de ello.

1 comentario en «Transporte en Cuba: de mal en peor»

  1. El movimiento de innovadores y racionalizadores fue la pasarela de la creatividad e inventiva en Cuba y seguro que hay muchas ideas novedosas por explotar.
    Hemos aprendido mucho al respecto y nada de eso se le ha permitido a sus creadores patentarlo en la OCPI en su legítimo derecho mientras se ve el fenómeno, se disecciona y hasta ahí llega

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