Sobre la mesa están, por estos días, varias posibilidades de cambiar la política migratoria de Estados Unidos, al menos, en algunos aspectos. El debate de alto nivel fluye entre congresistas de ambos partidos y el propio presidente Joe Biden. Entre los temas más analizados están las deportaciones y las entrevistas de miedo creíble.
Es un hecho, desde hace varias jornadas, que los republicanos están presionando al actual mandatario para que ejecute cambios en la frontera sur. A cambio darían su voto para otorgar un nuevo paquete millonario de ayuda a Ucrania.
La cadena CBS News refleja que Biden está dispuesto a aceptar un nuevo marco legal para facilitar la expulsión de migrantes. Eso sería sin los procesos habituales para solicitantes de asilo. La propuesta incluye una expansión significativa de las detenciones de migrantes y las deportaciones.
Se analiza, igualmente, endurecer aún más el proceso de la entrevista de miedo creíble. Actualmente, se ejecuta mediante la aplicación CBP One. Como se conoce, este sistema permite a los migrantes que se encuentren en México programar una cita en alguno de los puntos de control fronterizo.
CBP habilita cada día mil 450 citas. De ese total, alrededor del 95% de las historias que cuentan los migrantes son aprobadas y pueden acceder a suelo americano.
Republicanos contraatacan
Ante semejante alto porcentaje de aprobación los republicanos piden que se revise, detalladamente, cada elemento en la situación de los migrantes.
En tanto, las negociaciones plantean la posibilidad de expandir el proceso de remociones expeditas. De esa forma los oficiales de inmigración podrán deportar a los migrantes sin audiencias judiciales si estos no solicitan asilo o fallan en su entrevista inicial.
El enfoque representa un cambio significativo en el tratamiento de los casos de asilo. Se estima que tendría un impacto considerable en el flujo migratorio en la frontera sur de Estados Unidos.
