Durante los últimos aós fue relativamente fácil entrar a los Estados Unidos. Ahora vuelve a ser dificil emigrar al país del norte para quienes no aprovecharon las oportunidades de la anterior administración.
El nuevo presidente de Estados Unidos ha declarado la emergencia nacional en la frontera sur como una de sus primeras acciones tras asumir el cargo. Esta medida incluye un paquete de órdenes ejecutivas dirigidas a fortalecer el control migratorio, detener la entrada irregular y reformar aspectos clave de las políticas fronterizas.
Acciones principales bajo la emergencia nacional
Entre las medidas anunciadas, destacan las siguientes:
- Deportaciones aceleradas: La prioridad estará en migrantes con antecedentes penales, quienes serán procesados rápidamente para su expulsión.
- Política de “Quédate en México”: Se reinstaurará esta norma para que los solicitantes de asilo esperen fuera del país mientras se evalúan sus casos.
- Despliegue de tropas: Se enviará personal militar a la frontera para reforzar la seguridad y gestionar la situación migratoria.
- Fin del derecho de asilo y ciudadanía por nacimiento: Se limitará la posibilidad de obtener protección mediante asilo, y los hijos de personas en situación irregular nacidos en el país no recibirán ciudadanía automáticamente.
- Ampliación del muro fronterizo: Se acelerará la construcción de la barrera física en la frontera con México.
Restricciones a carteles y eliminación de la app CBP One
Como parte de estas acciones, los carteles de drogas han sido declarados organizaciones terroristas, lo que permite al gobierno federal ampliar su capacidad de combate contra estas redes. Además, se eliminará la aplicación CBP One, utilizada para programar citas de ingreso en los puertos fronterizos. La herramienta había facilitado el ingreso ordenado de migrantes con casi 1 millón de citas otorgadas, pero dejará de funcionar de manera inmediata, afectando a quienes ya tenían fechas programadas.
Implicaciones legales y políticas
La decisión de terminar con el derecho a la ciudadanía por nacimiento y limitar el asilo plantea desafíos legales. Estas modificaciones requerirían reinterpretar la Constitución, lo que ha generado polémica entre expertos legales y defensores de derechos humanos.
En cuanto a las deportaciones, las operaciones previstas se centrarán en ciudades clave y áreas de alta migración. La declaración de emergencia también otorga al gobierno amplios poderes para movilizar recursos federales, priorizando la integridad territorial y la seguridad nacional.
Reacciones y desafíos
La implementación de estas políticas ha generado incertidumbre entre comunidades migrantes, especialmente aquellas que dependían de programas como CBP One para regularizar su situación. Organizaciones defensoras de derechos han expresado preocupación por las consecuencias humanitarias de estas medidas, mientras que grupos favorables al endurecimiento de las leyes migratorias las consideran necesarias para proteger la soberanía nacional.
Con estas acciones, el nuevo gobierno busca marcar un cambio decisivo en la política migratoria del país, enfrentando desafíos logísticos, legales y éticos en su aplicación.
