Con el objetivo de controlar los niveles récords de inmigración irregular por su frontera, el estado de Texas enviará tanques de guerra a la zona. Así lo explicó la Guardia Nacional de esa región de Estados Unidos a través de su Ayudante General.
Ya se están desplegando vehículos blindados de transporte de personal M113 en la franja sur. Igualmente, la seguridad aumentará mediante la presencia de aeronaves con vuelos frecuentes sobre el área.
Esta, entre otras medidas, se adopta ahora por orden del gobernador del estado de Texas, Greg Abbott. Es parte de la estrategia actual para frenar el desmedido flujo migratorio de los últimos meses.
Un comunicado oficial de la Guardia Nacional se refiere directamente al tema. “Se toman medidas sin precedentes para salvaguardar nuestra frontera, repeler y hacer retroceder a los inmigrantes que intentan cruzar los límites ilegalmente”.
El propio gobernador anunció recientemente que invocará Cláusulas de Invasión de las Constituciones de Estados Unidos y Texas por razones de seguridad fronteriza.
Abbot le pasa la “pelota” al gobierno federal
El gobernador trata de “desmarcarse” del problema en cierto sentido alegando que Texas hace el trabajo que le corresponde a la administración del país. Obviamente Abbott no coincide con las políticas de “fronteras abiertas” aprobadas por Joe Biden.
Ante tal panorama, el gobernador aseguró que en enero, cuando el Congreso preste juramento, recordará al actual mandatario que asegurar la frontera es su responsabilidad. “Texas ha hecho más de lo que le corresponde durante muchos años”, sentenció Abbott.
Otras acciones indicadas por el gobernador de Texas incluyen construir un muro fronterizo en varios condados y desplegar lanchas cañoneras. Asimismo, se designó a los cárteles mexicanos de la droga como organizaciones terroristas internacionales.
Se pretende, igualmente, llegar a acuerdos con otros estados para garantizar la seguridad en la frontera. Por último, los condados dispondrán de más recursos para responder ante la invasión fronteriza.