La tormenta tropical Colin arrastró una embarcación de migrantes cubanos lejos de Florida, hasta una playa de Carolina del Norte. Esta tormenta se formó la semana pasada de forma inesperada en la costa este de Estados Unidos.
Penny Tindall, una residente en Caswell Beach, encontró en una playa cercana a su casa el bote de unos balseros cubanos tras el paso de la tormenta tropical Colin. La embarcación estaba vacía, por lo que inmediatamente alertó a las autoridades. Dentro del bote solo se hallaron seis remos caseros y unas bolsas con la etiqueta “Hecho en Cuba”.
Según un reporte del canal de noticias WECT, la Policía de Caswell Beach y la Guardia Costera iniciaron una investigación para conocer qué pasó con los balseros. Todo parece indicar que las fuertes olas arrastraron lejos de su destino a la embarcación, que probablemente se dirigía al sur de Florida.
Como resultado del mal tiempo, el barco fue empujado tres estados más hacia el norte, a cientos de kilómetros de su meta.
Detalles de un inesperado hallazgo
Penny Tindall contó que el bote “estaba hecho de espuma de poliestireno pesado y tenía lo que parecía ser el motor de un automóvil adentro”.
“Nunca pensé encontrar el bote improvisado en la orilla”, dijo al citado medio de prensa. Añadió que lo encontró este domingo, cuando fue al mar a broncearse y ver tortugas marinas.
Hasta el momento se desconoce la suerte de los que viajaban en él. Pudiera suponerse que arribaron a la costa y abandonaron la rústica embarcación. Pero quizá el mal tiempo los sorprendió en medio del mar, y los arrastró lejos de su objetivo.
Desde el inicio del año fiscal en octubre de 2021 hasta junio, la Guardia Costera de Estados Unidos (USCG) ha interceptado a más de 3 000 balseros cubanos en el Estrecho de la Florida. A pesar de los continuos llamados a desistir de realizar esta peligrosa travesía, cientos de cubanos se siguen lanzando al mar.