El próximo cambio de horario de invierno en Estados Unidos ya tiene fecha, y muchas personas se preparan para ajustar sus rutinas. Este año, el cambio se realizará el domingo 3 de noviembre. A las 2:00 AM, los relojes deberán retrasarse una hora, volviendo a marcar la 1:00 AM, como parte de la transición al horario estándar.
Este ajuste anual busca aprovechar mejor la luz solar durante los meses más oscuros del año. Con este cambio, las mañanas se vuelven más claras, permitiendo una mayor exposición a la luz natural.
Sin embargo, las tardes pierden luminosidad más rápidamente, lo que nos recuerda la llegada de los meses más fríos y tranquilos del año. Además, la ventaja más comentada es que se gana una hora adicional de sueño la noche del ajuste.
Aunque algunos estados han propuesto eliminar este cambio de horario, la mayoría del país continúa aplicando esta medida.
El cambio afecta diversas actividades cotidianas, desde la jornada laboral hasta los viajes y eventos sociales. Las personas deben estar preparadas para ajustar sus relojes y evitar confusiones en sus planes diarios.
Impacto en la salud y el bienestar
El cambio de horario no solo influye en nuestras rutinas, también puede tener efectos en la salud.
La reducción de horas de luz solar está relacionada con el Trastorno Afectivo Estacional (TAE), un tipo de depresión que aparece durante el otoño e invierno. Algunas personas pueden experimentar cambios en el estado de ánimo, niveles de energía más bajos e incluso dificultades para concentrarse.
Es importante ser conscientes de estos posibles efectos y tomar medidas para enfrentarlos, como aprovechar las horas de luz diurna o usar lámparas de luz artificial.
¿Cuándo cambia la hora en Estados Unidos?
Marcar el 3 de noviembre en el calendario es esencial para evitar confusiones en las actividades diarias.
Asegúrate de ajustar todos los relojes, especialmente aquellos que no cambian automáticamente, como los relojes analógicos, y planifica tu día tomando en cuenta esta modificación.
El cambio de horario es una tradición que, a pesar de ser debatida en algunos lugares, continúa siendo parte del día a día de millones de personas en Estados Unidos. Así que, no olvides atrasar tu reloj y disfrutar de esa hora extra de descanso.
