Solicitar la devolución del dinero invertido en el pasaje o reprogramarlo para el aeropuerto de La Habana son las únicas alternativas que les quedan a aquellos pasajeros que pensaban volar a nueve destinos cubanos después de diciembre.
Esa ha sido la política defendida por la aerolínea JetBlue y American Airlines, quienes eliminarán todas sus operaciones en los aeropuertos del interior del país, acorde a lo exigido por el gobierno republicano de Los Estados Unidos, y que fueron implementadas este mismo viernes por parte del presidente Trump.
En el caso de la primera de estas dos aerolíneas fue categórica en su comunicado de respuesta a la decisión del magnate presidente: «JetBlue ya no operará desde y hacia Camagüey, Holguín y Santa Clara a partir del 10 de diciembre de 2019». En la nota, además se disculpan con los afectados y les deja saber que desde ahora mismo pueden solicitar la devolución del dinero del pasaje, o bien las gestiones pertinentes para reprogramar su viaje por la capital del país.
Y es que tal y como se ha dado a conocer La Habana es la única ciudad del país que no se verá afectada en cuanto a los viajes comerciales provenientes desde los Estados Unidos, de modo que por lo que los pasajeros de JetBlue pueden servirse de los cupos disponibles para viajar por la capital.
También American Airlines se pronunció en las últimas horas, dejando claro su postura: «continuaremos cumpliendo con la ley federal, trabajando con la administración y actualizando nuestras políticas y procedimientos con respecto a los viajes a Cuba según sea necesario», pero en este caso no se esclareció como serían tratados los pasajeros afectados.
2) Todavía @AmericanAir permite comprar boletos a Camagüey y Santiago de Cuba ? pic.twitter.com/94zfyziTej
— Norges Rodríguez (@norges14) October 26, 2019
Sin embargo, estas no son las únicas compañías que se han visto forzadas a terminar sus vuelos hacia Cuba. Aun cuando no se han pronunciado al respecto, Delta, United y Southwest, son otras de las cuales ya no podrán operar en nueve destinos de la isla: Santa Clara, Holguín, Camagüey, Varadero, Cayo Coco, Cayo Largo, Cienfuegos, Manzanillo, y Santiago de Cuba.
El día de ayer el gobierno cubano condenó la medida considerándola arbitraria y según dijo el canciller cubano «endurece la prohibición de viajar a sus ciudadanos y mutila sus libertades».
No pocas veces se comienza a hacer sentir en las últimas horas, cuestionando el carácter inhumano de la medida. No solo partidarios del gobierno cubano, sino también detractores del régimen se han pronunciado en contra de lo que consideran una de las medidas más crueles de la administración de Donald Trump, pue tienen como principal afectado al pueblo de Cuba y la comunidad cubana radicada en los Estados Unidos, para quienes será mucho más difícil todo intercambio y acercamiento.
Según señalan algunos medios noticiosos el gobierno de La Habana podría cubrirse las espaldas y hasta quedar mejor parado en cuanto a la recaudación de divisas como quiera que habilitaría una flota de Airbus, próxima a llegar al territorio, para cubrir los itinerarios entre la capital y varias de esas ciudades del interior condenadas a la desconexión aérea con Estados Unidos.
En días pasados el presidente republicano había prometido mano dura con Cuba, y dijo que se encontraba revisando nuevas disposiciones y medidas, pero nunca dijo que sería el pueblo cubano el principal afectado. Y es que, en efecto, de eso se trata: Las nuevas disposiciones de Donald Trump aíslan mucho más a las familias de ambos lados del estrecho de la Florida, a la vez que cortan todo el flujo aéreo entre Cuba y los Estados Unidos, con la sola excepción de La Habana.