El nuevo mandato de Donald Trump ha generado incertidumbre sobre el futuro de los programas de asistencia social en Estados Unidos.
Sin embargo, a pesar de la preocupación inicial tras la orden de congelación temporal de fondos federales, la Casa Blanca parece que mantendrá los beneficios del Programa de Asistencia Nutricional Suplementaria (SNAP), y los food stamps no serán eliminados.
Beneficios SNAP seguirán activos
La secretaria de prensa de la Casa Blanca confirmó que los cupones de alimentos seguirán llegando a los beneficiarios, al igual que los pagos del Seguro Social y Medicare. Según el gobierno, la pausa en algunas subvenciones no afectará la ayuda directa a la población, sino que busca «proteger el dinero de los contribuyentes».
Actualmente, más de 42 millones de estadounidenses dependen del SNAP para adquirir alimentos básicos. Cuatro de cada cinco hogares beneficiarios incluyen a niños, adultos mayores o personas con discapacidad. En los últimos años, el gobierno ha destinado más de 110 mil millones de dólares anuales a este programa.
Cambios en SNAP para 2025
Aunque la asistencia se mantiene, se han introducido modificaciones para mejorar la seguridad y eficiencia del programa. Desde el 1 de octubre de 2024, los beneficios fueron ajustados para compensar el impacto de la inflación, con aumentos modestos de $1 por persona y $2 por familia de cuatro miembros. Sin embargo, en Hawái el monto máximo se redujo de $527 a $517.
Además, en 2025 se implementarán tarjetas EBT con chip en todo el país para reducir el fraude, una iniciativa ya aplicada en estados como California y Oklahoma. También se está probando un sistema que bloquea transacciones sospechosas fuera del estado, exigiendo activación manual para su uso legítimo.
Inquietud ante posibles cambios futuros
Aunque los cupones de alimentos siguen activos, las decisiones del gobierno en torno a la asistencia social continúan generando debate. Organizaciones y beneficiarios temen que futuras medidas de austeridad puedan afectar el programa, mientras la administración insiste en que su objetivo es garantizar que la ayuda llegue a quienes realmente la necesitan.