La periodista independiente cubana Mónica Baró, última ganadora del premio iberoamericano de Periodismo, Gabriel García Márquez, fue seleccionada entre las personas más destacadas de América Latina en el año que termina, 2019, para el diario español El País. Según la publicación, el continente ha vivido varias convulsiones pero no son las grandes personalidades de renombre y de siempre, quienes han favorecido a los cambios y transformaciones, sino gente anónima aparentemente.
El diario, sobre el caso específico de Mónica Baró, que ubicó en el puesto tres del listado, dijo que había sido: “ganadora del premio Gabriel García Márquez en la categoría de texto por su trabajo «La sangre nunca fue amarilla». Periodista independiente cubana colaboradora con la revista digital El Estornudo en un país donde es difícil serlo. En 2016 ya fue finalista con el texto «La mudanza”. Y en efecto, Baró deslumbró al jurado del premio Gabo, con una investigación que hablaba sobre el envenenamiento con plomo en una localidad de la Isla, y donde el gobierno trataba de ocultar los hechos.
No es la primera vez que Mónica aparece en un listado de personas influyentes dentro de la Isla. La revista colombiana Avianca, publicación de la aerolínea de igual nombre hizo un número especial dedicado al centenario de la compañía aérea, e incluyó a cuatro cubanos dentro de los 100 latinos más influyentes del continente, entre ellos estaba la periodista graduada de la Universidad de La Habana. Todos los jóvenes cubanos incluidos eran menores de 35 años, lo que habla del poder de la juventud para los cambios.
Sobre Baró, la revista Avianca había escrito que “fue reconocida por hacer periodismo independiente en Cuba. Este año ganó el premio Gabo a Mejor texto con La sangre nunca fue amarilla, sobre un caso de envenenamiento por plomo en un barrio de La Habana. Invita a ser fieles a los principios. Y la citaba diciendo: “En mi país es ilegal lo que hago, pero yo siento que es lo correcto”.