En medio de una crisis eléctrica que persiste, el Sistema Eléctrico Nacional (SEN) en Cuba enfrenta desafíos colosales en su capacidad de generación y distribución de energía eléctrica para hoy 11 de agosto de 2023.
Apenas ayer, se vio paralizado el servicio debido a un alarmante déficit de capacidad de generación que comenzó a las 19:48 horas. Lamentablemente, no fue sino hasta las 03:01 horas de esta mañana que se logró restaurar parcialmente la capacidad de generación, dejando en evidencia la precaria infraestructura eléctrica del país una vez más.
Durante esta jornada, el punto más crítico se registró a las 22:50 horas, con una afectación máxima de 355 megavatios (MW). Esto no solo afectó a hogares y comercios, sino que tuvo un impacto directo en el normal funcionamiento de diversas áreas.
Las cifras son desalentadoras. A las 07:00 horas, se constató que la disponibilidad del SEN era de apenas 2620 MW, mientras que la demanda se situaba en 2550 MW. Aunque se insiste en que todo el sistema está operativo, las limitaciones son innegables, generando incertidumbre entre la población que ya enfrenta numerosas dificultades.
Se ha planteado la esperanza de que durante las horas diurnas no se suscitarán nuevas interrupciones debidas al déficit de capacidad de generación, pero esta afirmación parece poco sólida considerando el panorama actual.
La falta de mantenimiento y la persistente avería de unidades es alarmante. La unidad 4 de la Central Termoeléctrica (CTE) Cienfuegos, la unidad 3 de la CTE Renté y la unidad 2 de la CTE Felton permanecen inoperativas debido a problemas de averías. Sumado a esto, la unidad 6 de la CTE Renté está en un estado de mantenimiento, lo que resalta una negligencia preocupante en la gestión y el cuidado de la infraestructura eléctrica.
La generación térmica, que podría aliviar en parte esta situación, sigue presentando limitaciones con apenas 361 MW de capacidad disponible. Esta cifra agravante solo contribuye a la profundización de la crisis en el sistema eléctrico.
La generación distribuida, que podría brindar un respiro, se encuentra igualmente afectada. Con un total de 1019 MW fuera de servicio debido a averías y 128 MW en proceso de mantenimiento, las soluciones parecen distantes.
Pese a los esfuerzos por proyectar una leve mejoría durante el horario pico, la realidad es desalentadora. Se pronostica una recuperación de unos 60 MW que actualmente están fuera de servicio debido a problemas de suministro de combustible en las centrales de generación distribuida. También se espera la entrada en operación de la unidad 2 de la Hidroeléctrica Hanabanilla con 14 MW, y las unidades 4 de la CTE Cienfuegos y 3 de la CTE Renté, aunque en proceso de arranque, aportarán 120 MW y 80 MW respectivamente. Sumando a este panorama, se espera que los motores de generación distribuida agreguen 165 MW.
Con estas medidas, se calcula una disponibilidad de energía eléctrica de 3059 MW durante el horario pico, mientras que la demanda máxima se prevé en 3100 MW, generando un déficit de 41 MW. Aunque se intenta pintar un escenario menos sombrío, la realidad es que, si las condiciones pronosticadas se mantienen, una afectación de hasta 111 MW durante este período crítico parece inevitable.
Antes del año 1959 en Cuba solo el 8% de la población tenía acceso a la electricidad y hoy en día el 99.9% de la población tiene acceso a ella y hoy somos el doble de la población. Buenas tardes para todos. Saludos Julio.