La Embajada de Canadá en La Habana, capital de Cuba, ha hecho oficial la suspensión a partir de este miércoles de la mayoría de los servicios consulares ofrecidos a ciudadanos cubanos. Entre los servicios suspendidos se hallan los trámites para Visas de turismo, Visas de trabajo y las entrevistas de solicitud de residencia permanente.
Según el reporte del portal de noticias Nuevo Herald, que cita la información oficial de la Embajada de Canadá: «A partir del 8 de mayo de 2019, la oficina de Visas en Cuba está cerrada. La oficina de Visas en México ahora procesa las solicitudes de Cuba».
Los trámites de solicitud de residencia permanente ya comenzados en la Habana serán transferidos a las oficinas de Visas de inmigración en la Ciudad de México, también.
La Embajada de Canadá permanecerá abierta para la realización de trámites de pasaportes canadienses, para trámites de certificados de ciudadanía y solicitudes de documentos para viajar en el caso de residentes permanentes.
Esta medida resulta casi idéntica a la dictada por el Departamento de Estado de los Estados Unidos, bajo el pretexto de supuestos incidentes de salud que afectaron a funcionarios de la Embajada de Estados Unidos en La Habana a finales de 2016.
Según Canadá, 14 supuestos casos de problemas de salud de origen desconocido también han sido constatados en sus funcionarios desde inicios de 2017. En abril de 2018, Canadá cambió la clasificación de su Embajada en Cuba a “puesto no acompañado”, y prohibió a las familias de los diplomáticos venir para La Habana.
En enero de 2019, Canadá redujo su personal consular en Cuba. Y un comunicado de la Cancillería de Canadá en ese momento afirmaba: «Revisaremos todos nuestros puestos diplomáticos en Cuba, con miras a equilibrar nuestro deber de atención a los miembros de nuestro personal y sus familias, con la necesidad constante de prestar servicios a los canadienses en Cuba, y promover y proteger Intereses canadienses allí».
En abril de 2017, funcionarios de Canadá manifestaron que presentaban problemas de salud con síntomas como mareos, dolores de cabeza y falta de capacidad para concentrarse.
En marzo de 2018, Canadá pidió una revisión de las instalaciones consulares en Cuba y no se encontró nada capaz de provocar tales síntomas a sus funcionarios consulares. No obstante, galenos de Canadá y Estados Unidos manifestaron los diplomáticos podían desarrollar una lesión cerebral si se quedaban en Cuba.
Estados Unidos, con similares pretextos, dictó una medida similar a finales de septiembre de 2017, y sacó de Cuba el 60 por ciento de su personal consular y detuvo la entrega de Visas. En la Embajada de Estados Unidos en La Habana solo permanece el personal indispensable.
Cuba ha reiterado que no tiene responsabilidad alguna en los supuestos padecimientos de funcionarios de Estados Unidos y Canadá.
La Cancillería cubana ha asegurado que estos síntomas son solo un pretexto para dificultar las relaciones bilaterales. Cuba ha cooperado en todas las investigaciones y ha accedido a que personal especializado de Estados Unidos y Canadá investigara en La Habana.