El gobierno de Panamá ha decidido prorrogar por otros 30 días el cierre de su espacio aéreo, por razones de salud pública, según una resolución de la Autoridad de Aeronáutica Civil (AAC).
Se trata de la cuarta vez que se sostiene la interrupción de vuelos internacionales desde que el 22 de marzo se procediera al cierre de fronteras debido a la crisis sanitaria internacional.
Ahora el gobierno de Nito Cortizo ha comunicado otros 30 días de cierre de fronteras aéreas, de modo que se corre hasta el 21 de agosto próximo la posible fecha de apertura.
La decisión se sustenta en las complejidades que describe la región de las américas y el resto del mundo, y es de estricto cumplimiento para todas las aerolíneas comerciales de pasajeros, así como para la actividad aérea en general.
Solo se hace una excepción relativa a los vuelos humanitarios de repatriación y los de transporte de equipos y suministros médicos, de medicamentos, alimentos y otros insumos necesarios para el enfrentamiento de la pandemia.
La medida se ha comunicado justo antes de que se cumpliera el plazo anteriormente fijado, y que expiraba este 22 de julio, fecha en que se esperaba una apertura.
Sin embargo, con esta nueva postergación se obliga nuevamente a reajustar la planificación de las diferentes aerolíneas, sobre todo de la panameña Copa Airlines y su subordinada low cost Wingo, las cuales habían programado su apertura para el venidero 7 de agosto, pero ahora verán todavía más extendido el cierre de sus operaciones.
La medida se contrapone con las solicitudes cursadas días atrás por la Asociación de Transporte Aéreo Internacional (IATA por sus siglas en inglés) que considerando que la industria de la aviación estaba preparada para reiniciar las labores, instó al gobierno panameño a que reabriera sus fronteras.
El Aeropuerto Internacional de Tocumen se ha declarado listo para una reapertura y en ese sentido se ha preparado, a la vez que no ha dejado de servir como punto de conexión de vuelos internacionales humanitarios.
Sin embargo, el país centroamericano enfrenta el peor de los escenarios, desde que en junio pasado se dispararon las tasas de contagio. Hoy son 1038 muertos y casi 52 mil infectados, de los cuales el 46 por ciento se mantienen activos.
Miles de cubanos aguardan por una eventual apertura del espacio aéreo en ambos países, toda vez que tienen en Panamá el principal destino para realizar sus inversiones, sobre todo compras de electrodomésticos, vehículos, textiles y calzado.
Entre las preguntas más frecuentes en estos momentos está ¿Cuántas maletas de equipaje y kilogramos podrán entrar los cubanos a partir de la tercera fase?
Hoy “se mantiene la restricción de entrada y salida del país y la limitación de una sola pieza de equipaje en bodega de hasta 32 kg para todos los pasajeros que arriben al país”, precisaba sobre esa comparecencia el portal web Cubadebate, pero una vez que se autorizan las operaciones aéreas con el exterior en la modalidad de vuelos regulares, se ampliaría a “dos piezas de equipaje de hasta 32 kg cada una”.