La generación eléctrica en Cuba enfrenta una situación crítica en la noche de hoy, según reportó el periodista Lázaro Manuel Alonso en su perfil de Facebook.
A las 6:45 p.m., casi 1500 MW del Sistema Eléctrico Nacional (SEN) se encontraban apagados, lo que coloca al país en un estado de emergencia energética.
El país registra un déficit de capacidad de generación de aproximadamente 1457 MW, según datos compartidos a través del Canal de Telegram de la Empresa Eléctrica de Mayabeque.
Este déficit está afectando a varias provincias, que han visto una drástica reducción en su capacidad de atender la demanda eléctrica, debido tanto a la demanda pico como a la insuficiente capacidad de generación operativa en ese momento.
Por ejemplo, Mayabeque, una de las provincias más afectadas, enfrenta una demanda de 86 MW, lo cual ha generado afectaciones directas a los usuarios.
Este problema se suma a una serie de dificultades que el sistema eléctrico ha experimentado en los últimos meses, con apagones frecuentes y prolongados debido a problemas técnicos en las plantas de generación y a la falta de mantenimiento adecuado.
El contexto de estos apagones no es nuevo. Artículos recientes de Directorio Cubano han alertado sobre la frágil situación del SEN, que se ha visto fuertemente afectado por el deterioro de las centrales termoeléctricas, la escasez de combustible y la falta de inversión en infraestructura eléctrica. Además, la crisis energética mundial y las sanciones internacionales han exacerbado estas problemáticas, limitando aún más la capacidad del gobierno cubano para adquirir piezas de repuesto y combustible en el mercado internacional.
Los continuos problemas en la generación eléctrica están afectando de manera significativa la vida cotidiana de los ciudadanos cubanos, quienes ya han tenido que enfrentarse a largos periodos sin electricidad en los últimos meses.
Los apagones afectan no solo a los hogares, sino también al funcionamiento de servicios esenciales como hospitales, el suministro de agua potable y la producción de alimentos, exacerbando una situación económica ya de por sí difícil.
Las autoridades cubanas no han ofrecido hasta el momento un pronóstico claro sobre cuándo el SEN podrá restablecer su capacidad de generación, lo que aumenta la preocupación de la población.
Es evidente que la crisis eléctrica en Cuba continúa profundizándose, y los próximos días serán determinantes para ver si se logran implementar soluciones temporales que permitan mitigar las afectaciones y evitar un colapso más grave del sistema.
