Volar hacia Panamá para hacer escala allí y conectar con un segundo vuelo podría dejar de ser una opción o aumentar su precio tras una posible ley que amenaza con establecer impuestos a pasajeros de tránsito por al Aeropuerto Internacional de Tocumen.
El proyecto, presentado ante la Asamblea Nacional por el diputado del partido de gobierno (Partido Revolucionario Democrático) Roberto Ayala, busca cobrar un impuesto de 25 USD a cada pasajero que use la terminal aérea, los puertos o los pasos fronterizos, en su tránsito hacia otros países.
“El dinero recaudado se invertiría en el financiamiento de las pensiones públicas y varios programas de nutrición.
Desde el mismo PRD, otro diputado, Raúl Pineda presentó también un proyecto que pretende incentivar a las aerolíneas a crear nuevas rutas hacia el país itsmeño y cobrar también un impuesto a quienes lleguen de tránsito, pero de 5 USD.
El diputado justificó su propuesta de ley con el dato de cómo por Panamá pasan en tránsito cerca de 13 millones de personas al año, quienes usan las instalaciones del aeropuerto y “no le aportan nada al país”.
Pineda afirmó que esta “Ley de Incentivos a Líneas Aéreas” democratizará el espacio aéreo panameño con la compensación a las aerolíneas —a través de este fondo creado por los impuestos— permitirá un aumento del 44 por ciento de los turistas y alcanzar la cifra de los 3 millones en 2020.
Sin embargo, las reacciones de las aerolíneas en contra de los anteproyectos de ley presentados por el PRD no se hicieron esperar y fue el presidente de la Asociación de Aerolíneas Aéreas de Panamá, Freddy Rodríguez, quien planteó que estas propuestas pueden afectar directamente a Copa Airlines, la mayor compañía aérea del país.
“La aprobación de alguno de estos anteproyectos pondría en peligro el Hub de las Américas”, dijo, refiriéndose a un programa de Copa que brinda horarios de vuelo convenientes, diseñado para conexiones rápidas y un servicio sin interrupciones de un extremo a otro.
Este programa permite que los equipajes sean registrados directamente hasta el destino final del pasajero y no es necesario pasar por aduana o por inmigración durante las conexiones.
Enrique Pesantez, uno de los mayores empresarios del gremio de los turoperadores, también se opuso a estas propuestas y alegó que tendrán el efecto contrario.
Un comunicado emitido por la industria de la aviación recordó que Panamá ha sacado ventaja a su posición geográfica para convertirse en un importante centro de conexiones aéreas en la región.
La nota publicada agregaba que “esto se debe, en gran parte, a su política de cielos abiertos adoptada desde 1994, a la competitividad del Aeropuerto Internacional de Tocumen y a la inversión en infraestructura aeroportuaria”.
El Aeropuerto Internacional de Tocumen cuenta con un gran número de tiendas libres de impuestos y según datos de la Asociación Internacional de Transporte Aéreo (IATA), la industria aérea genera 238 mil empleos directos y un aporte de 8500 millones de dólares (14%) al Producto Interno Bruto.
Con vuelos directos a 89 destinos, muy superior a otras ciudades con mayor población, la conectividad del Aeropuerto de Tocumen ha proporcionado al país itsmeño sedes regionales de empresas multinacionales, comercio, logística y la inversión extranjera, según declaraciones de expertos.
En el caso de Cuba, son varios los vuelos que hacen escala en Panamá, donde no se les exige a los cubanos una visa de tránsito y por tanto son esas conexiones las más demandadas.
Una ley como esta podría causar la disminución de esos vuelos con escala panameña, y dificultar el viaje y sus trámites, así como también encarecerlos.
Te avisamos cuándo están dando citas para visa en la Embajada de Panamá