En su discurso del Estado de la Unión, Joe Biden esbozó algunos de los planes económicos para combatir la inflación y “construir una América mejor”.
Considerado el “Super Bowl de la política”, el discurso está contemplado en la Constitución de los EEUU y establece que el presidente “debe ocasionalmente darle información al Congreso sobre el Estado de la Unión y recomendar a su consideración ciertas medidas que él considere necesarias y oportunas”.
Joe Biden ha centrado la mayor parte de su discurso en presentar una “nueva visión económica para Estados Unidos”.
Uno de los aspectos a los que hizo referencia fue a la infraestructura del país.
“Estados Unidos solía tener las mejores carreteras, puentes y aeropuertos. Ahora nuestra infraestructura ocupa el puesto 13 en el mundo. No podremos competir por los trabajos del siglo XXI si no arreglamos eso”, expresó.
A continuación, anunció que en 2022 comenzarán “a reparar más de 65,000 millas de carreteras y 1,500 puentes en mal estado”.
Biden destacó el hecho de que muchas empresas estén optando por construir nuevas fábricas en los EEUU, “cuando hace tan solo unos años, las habrían construido en el extranjero”.
Informó que “Ford está invirtiendo 11 mil millones de dólares para construir vehículos eléctricos, creando 11,000 empleos en todo el país”.
Asimismo, explicó que General Motors “está realizando la inversión más grande de su historia: $7 mil millones para construir vehículos eléctricos, creando 4,000 empleos en Michigan”.
El presidente reconoció que a pesar de todos “los puntos positivos de nuestra economía, el crecimiento récord del empleo y los salarios más altos, demasiadas familias luchan para mantenerse al día con las facturas”.
En este sentido, delineó las propuestas de su gobierno para combatir la inflación:
“Reducir sus costos, no sus salarios. Fabricar más automóviles en Estados Unidos. Más infraestructura e innovación en América y más trabajos en los que pueda ganarse bien la vida en Estados Unidos. No depender de cadenas de suministro extranjeras”.
Biden hizo referencia específicamente a tres puntos:
- Limitar el costo de la insulina a 35 dólares al mes para 200 000 jóvenes con diabetes tipo 1, “para que todos puedan pagarla”.
- Reducir los costos de la energía para las familias en un promedio de $500 al año, combatiendo el cambio climático. En este punto, propuso ofrecer créditos fiscales para climatizar los hogares y negocios para que sean energéticamente eficientes. Además, bajar el precio de los vehículos eléctricos para ahorrar alrededor de $80 al mes.
- Disminuir el costo del cuidado de niños. Muchas familias pagan hasta $14,000 al año por el cuidado de solo uno de sus hijos, señaló el mandatario.
En este último tema, Biden consideró que “las familias trabajadoras y de clase media no deberían tener que pagar más del 7% de sus ingresos por el cuidado de niños pequeños”.
De tal manera, aseguró que su plan “reducirá el costo a la mitad para la mayoría de las familias y ayudará a los padres, incluidos millones de mujeres”.
En relación con los impuestos (taxes), señaló que “nadie que gane menos de $400,000 al año pagará un centavo adicional en nuevos impuestos”.
Además, manifestó que “17 premios Nobel de economía” confirmaron que este plan “aliviará las presiones inflacionarias a largo plazo”.
