Una familia cubana enfrenta una devastadora pĂ©rdida tras el paso del huracán Milton, cuando Alejandro Alonso, de 72 años, fue arrastrado por un tornado en Fort Pierce, Florida.Â
El trágico suceso ocurrió en un campo de casas móviles en la comunidad de Spanish Lakes, una de las zonas más afectadas por los tornados que azotaron el área antes de la llegada del huracán. Noticias 23 habló con Ana Alonso, esposa de Alejandro durante más de 40 años, quien compartió los dolorosos momentos vividos tras la tragedia.
El nieto de Alejandro estaba hablando con su abuelo por teléfono en el instante en que el tornado alcanzó su casa.
 «Mi nieto escuchĂł a su abuelo gritar, pero era un grito de horror», relatĂł Ana. Durante la llamada, el joven intentĂł ayudar a su abuelo sugiriĂ©ndole que se colocara el casco de su motocicleta para protegerse, pero Alejandro no tuvo tiempo de ponĂ©rselo. Las Ăşltimas palabras que le dijo su nieto fueron: «SĂ© fuerte para mĂ», antes de que la llamada quedara en completo silencio.
Trágica historia de cubano que murió por un tornado en Florida
Cuando el nieto llegĂł al lugar, se encontrĂł con una escena desoladora: el tornado habĂa destruido por completo la casa mĂłvil. «Solo quedĂł el cemento de donde se parqueaban los carros, y la motocicleta Harley de mi esposo estaba doblada por la fuerza del viento», explicĂł Ana al citado medio.Â
Tras recorrer los escombros, el nieto descubrió el cuerpo de su abuelo entre los restos. «A mi nieto esto nunca se le va a olvidar», agregó Ana, entre lágrimas.
En medio del dolor, un pequeño milagro trajo algo de consuelo a la familia. Entre los escombros, un vecino logrĂł encontrar con vida a la perrita de la familia, LulĂş, de 14 años. «Cuando nos dijeron que habĂan encontrado a LulĂş viva, tanto mi hija como yo nos pusimos a llorar», contĂł Ana, agradecida de que, al menos, su fiel compañera sobreviviĂł.
El huracán Milton dejĂł un saldo devastador en Florida, con al menos 11 personas fallecidas, la mayorĂa vĂctimas de los 45 tornados que azotaron el estado antes de que el ciclĂłn tocara tierra en Tampa.