El gobierno cubano reitera por estos días el mensaje de que la canasta familiar continúa siendo una prioridad, a pesar de la limitada entrega de productos y el retraso en la distribución.
El Primer Ministro Manuel Marrero Cruz señaló al respecto: “casi todos los productos de la canasta familiar hay que importarlos, y esta es la prioridad a la hora de destinar divisas para invertir”.
Así trascendió en el contexto del Análisis del Dictamen de la Comisión de Atención a los Servicios, ante la rendición de cuenta del Ministerio de Comercio Interior a la Asamblea Nacional, que cita Cubadebate.
De acuerdo a la información ofrecida, en los últimos tres años ha aumentado la “dependencia de las importaciones para asegurar los productos”, porque disminuye la “participación de la producción nacional de arroz, frijoles, huevos, leche y otros alimentos”.
En este sentido, Marrero Cruz admitió que la canasta ha presentado dificultades en su estabilidad en tiempo, porque alegó que se debe a que “el financiamiento no se obtiene de forma oportuna”.
Cuba no puede cumplir con el subsidio a la canasta familiar normada
A finales del año pasado, el entonces Ministro de Economía de Cuba, hoy acusado de corrupción, Alejandro Gil Fernández, hizo referencia al estado de opinión del pueblo sobre este tema:
“(…) nuestra población cree que estamos manteniendo el subsidio de la canasta familiar normada a todos los las personas por igual. Sin embargo, no todas las personas en el país tienen la misma capacidad adquisitiva. Eso es un asunto que tenemos que revisar”.
En la misma línea, añadió que “esa pretensión de mantener un nivel de aseguramiento de productos a precios muy subsidiados en la actualidad, no es una distribución equitativa o justa”. Además, calificó como “altísimo” el costo que tiene la canasta familiar normada en Cuba, situándolo en más de 1600 millones de dólares.
Aunque de Gil Fernández poco o nada oficial se sabe, otros gobernantes cubanos compartieron sus opiniones. El propio Marrero Cruz dijo ante el Parlamento que no es justo que todos reciban la misma ayuda sin que se tenga en cuenta su nivel de ingresos. Mencionó la necesidad de “subsidiar a personas y no a productos”.
Por su parte, Betsy Díaz Velázquez, ministra de Comercio Interior (MINCIN), afirmó que la canasta familiar normada continuaría distribuyéndose por la libreta en el 2024. Pero, anunció que en un futuro el subsidio iría solamente para las personas identificadas como vulnerables por el Ministerio de Trabajo y Seguridad Social.
se verán horrores para q nuestro líder FIDEL C luchó tanto,si viera estos desastres x dios al final no todos tenemos una situación económica buena , entonces para q hicieron tantas Mipmi,estamos en los tiempos de mi abuelo ricos y pobres y paga el pobre