Cuando Cuba anunció que abriría sus puertas al turismo internacional desde el primero de julio pasado, lo hizo contando con que su principal emisor volvería a confiar en la isla como destino seguro.
Dos meses después, los primeros turistas canadienses regresaron a Cayo Coco y Cayo Guillermo, primero con salidas desde Montreal y más tarde desde Toronto.
Desde la Oficina de Turismo de Cuba en Toronto comunicaron que a partir de noviembre Cuba abriría otros destinos turísticos y los canadienses podrían disfrutar de la isla, más allá de los cayos.
Pues, recientemente, Travelindustry Today, publicación online canadiense sobre noticias de viajes, ha confirmado la reanudación de los vuelos Canadá-Varadero desde noviembre próximo, en el contexto de la apertura del balneario más popular de Cuba.
De acuerdo a la revista, los canadienses podrán tomar vuelos de Air Canada hacia Varadero a partir del 6 de noviembre.
Se uniría a este operador turístico, Hola Sun, con propuestas de paquetes turísticos en ese mes para hoteles en Varadero.
En diciembre, le seguirán Sunwing y Transat.
Según la publicación, los viajeros canadienses deben contar con reservaciones de hotel para poder realizar los viajes; “los pasajeros en viajes directos no pueden ingresar al país en estos momentos”.
Recuerdan que las autoridades de turismo cubanas han informado sobre todos los protocolos de bioseguridad implementados, y que a las llegadas, los extranjeros deberán realizarse una prueba de PCR (gratuita), además de contar con un seguro covid-19, o comprar un seguro médico en el aeropuerto (US $ 30).
La información difundida sobre la apertura de Varadero al turismo internacional refiere la existencia de un corredor turístico seguro desde la calle K hasta Punta Hicacos (final de la península).
Allí los turistas dispondrán de varios hoteles de 4 y 5 estrellas, campo de golf, dos marinas, delfinario, dos plazas comerciales (Plaza América y Plaza Hicacos), además de restaurantes y otros servicios.
Los tours y excursiones disponibles solo podrán realizarse en la zona aprobada, e incluyen deportes acuáticos, actividades náuticas que ofrecen las dos marinas y el delfinario; autobús turístico de dos pisos; recorridos en bicicleta y alquiler de automóviles en el área permitida.
Se ha previsto, además, evitar el manejo de efectivo, por tanto todos los servicios deben pagarse con tarjetas de crédito o visa de débito de los bancos canadienses.
Como ya se ha explicado todos los hoteles incluirán un equipo médico compuesto por un médico, una enfermera y un especialista en epidemiólogo para monitorear la salud de los huéspedes durante su estadía.
Según declaraciones del director canadiense de la Oficina de Turismo de Cuba, Lessner Gómez, la principal prioridad en la isla “es la seguridad de nuestros clientes y personal, por lo que en esta etapa inicial, la movilidad de los clientes y el alcance de las excursiones se limitará al área aprobada”.
O sea, “los turistas no podrán bajo ninguna circunstancia salir de la zona turística segura, no pueden visitar el resto de la isla y los lugareños no pueden ingresar a la zona turística».
Este viernes 16 de octubre se deben conocer más detalles de cómo será la vuelta de Cuba, anunciada recientemente, a la nueva normalidad en los sectores del turismo y el transporte.
Los lectores nos han manifestado muchas inquietudes que esperamos sean respondidas de manera oficial próximamente.